“Quietecita pa’ la foto”
Por LA MADA (Magdalena Edith Carrillo Mendívil)
www.lamaddalenaedi.blogspot.com
Sin siquiera proponérmelo me doy cuenta que estoy de pie,
parada, digamos: en reposo…
en realidad no lo puedo ver, no hay espejos a mi rededor,
además sin compañía a mi lado no hay quien me haga consciente de ello,
Esto es aún mejor, comienzo a sentirlo y a ser consciente
de mi falta de movimiento.
¡Hace tanto tiempo que no detenía mi carrera!
Aunque a veces el andar era lento
siempre había ruido, rumores, voces,
cada pie arrebataba la intención del otro.
Uno tras otro, tras otro, tras otro…
Cuando el andar se cansaba lo arrastraba
y era solo entonces cuando podía sentir
el tierno roce de la tierra o,
la más de las veces, el cosquilleo del pavimento.
Ahora no hay vibración ni cuchicheo bajo mis pies.
No hay desesperación por llegar, no hay prisa
y aunque hay necesidad de seguir andando
ahora estoy en reposo.
Puedo escuchar el viento que platica con mi mente,
quien pocas veces escucha, esta vez no interroga,
se envuelven en un monólogo que en ocasiones
es interrumpido por el calor del Sol
o por un vanidoso caballo en forma de nube
que galopa dejando una nube de nube tras de sí.
Entonces el viento vuelve a tomar control de su discurso.
Estar de pie, parada, en reposo
me recuerda que hay un camino por seguir
pero por lo pronto el saber que tengo
control de mis movimientos, siempre de prisa,
me hace sentir el poder de actuar y decidir
en este cuerpo, en este espíritu…
Voluntariamente en reposo.