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Dr. José de Jesús Reyes Ruiz
QUIÉN ES QUIÉN EN EL ESTADO DE MÉXICO
O para el caso, en Zacatecas o en el país entero.
Para documentar mi pesimismo… y el de los demás
Estamos en los difíciles tiempos del año 2017, año que será el preámbulo de la batalla más importante del México contemporáneo, la que se dará en el 2018 en condiciones que por primera vez pueda resultar triunfador – ojala -  una visión diferente de país, de la que nos han llevado por los caminos del neoliberalismo bajo las siglas del PRI y del PAN durante los últimos 30 a 35 años y que ha dejado a nuestra nación en una situación de quiebra técnica, con una deuda que pone seriamente en peligro su futuro y en una circunstancia que nos coloca  al borde del precipicio.
Las cosas pueden cambiar, pero tienen que darse varios sucesos para que esta posibilidad se haga una realidad. Sin embargo; existen  muchos intereses dentro de las cúpulas del poder establecido, tanto políticas como empresariales, que harán hasta lo imposible, y gastaran lo que sea necesario para mantener el status quo, que tanto les ha beneficiado.
Y eso sin contar con las influencias y los recursos – ilimitados - del crimen organizado que día a día juegan un papel más relevante en el quehacer político de nuestra  nación.
En este escenario, a todos nos queda claro que la antesala, el preámbulo de esta gran posibilidad para cambiar el rumbo; se encuentra ya a la vuelta de la esquina, y claro que estamos hablando de la elección del Estado de México -ya a menos de un mes de distancia-, en donde sin lugar a dudas y en gran medida se decidirán los destinos de esta gran nación.
Para bien… o para mal.
No debemos olvidar que ya en el pasado, definían -a la elección del Estado más poblado y con más electores de este país-, como un laboratorio donde se podía predeterminar,  o al menos tener alguna idea de lo que pasaría un año más tarde en las elecciones federales. Pero es claro que nunca como ahora, este proceso, tiene el poder de definir con mayor certeza lo que pudiera pasar dentro de un año y con ello encontrar un futuro con la Esperanza de un Cambio Real, o de que todo – tristemente - siga igual.
No olvidemos que el Estado de México es el bastión principal del PRI, -el partido en el poder-, un poder que dejó - en una alternancia relativa - para retomarlo hace 5 años con un NUEVO PRI nada renovado o podríamos decir mejor entrenado en los asuntos de corrupción e impunidad, como lo vimos en la mayoría de los exgobernadores que recién salieron dejando endeudados brutalmente a sus estados y con una larga lista de tropelías que están -al menos eso nos dicen-, "siendo investigadas" por nuestras instituciones, siempre parciales a los deseos del ocupante en turno en los Pinos.
La idea de las reflexiones presentes -y las que vendrán en las siguientes semanas- es la de analizar a los personajes que protagonizan la contienda en el corto plazo, -junio del 2017- y aquellos que posiblemente serán los protagonistas de la lucha del 2018 por la silla grande; ya sea por la continuidad o por el cambio de rumbo.
Para comenzar tendríamos que reconocer que la elección en el  Estado de México del presente año, es diametralmente opuesta a la que se dio hace 6 años cuando el Gobernador saliente, un tal Señor Peña, estaba por dejar la gubernatura para participar en la contienda por la presidencia de la república, en condiciones totalmente diferentes a las que existen hoy en día.
Hace 6 años, para preparar su sucesión en el Estado de México, el actual ocupante de los pinos, y su impulsor, el tío Montiel, con todo el apoyo del grupo Atlacomulco, lograron en primera instancia manipular -a través del congreso local-, las leyes electorales con el objetivo  de ponerlas a modo para el nuevo triunfo y la perpetuación en el poder de su partido. Estas leyes aún siguen vigentes para comodidad de los priistas y dificultad de los opositores.
Hace seis años además pudieron controlar un intento de desprendimiento -que pudiera haber sido de consecuencias fatales-, del precandidato no designado Eruviel Ávila quien se reveló ante la posibilidad de la imposición del actual -ahora si-, candidato Del Mazo, primo –PRI MAZO– del actual señor de los Pinos.
No debemos olvidar -porque tiene una importancia vital para lo que sucede hoy 6 años después-,  que entonces, Eruviel inició, una serie de negociaciones con un perredista líder de una de las corrientes hoy por hoy más importantes, el señor Héctor Bautista. Juntos pensaron en la posibilidad de un desprendimiento que le permitiría a Eruviel encabezar la candidatura del Partido de la Revolución Democrática y lograr el triunfo desde la disidencia.
Esto lo vio Peña Nieto como un desastre posible en el inicio de su precampaña por la Presidencia de la República y no le quedó de otra, que sacrificar al primo del Mazo, en favor del disidente en potencia y así fue como Eruviel se hizo de la candidatura,  y claro; de la victoria.
En aquellos tiempos la oposición fue -al perderse la alternativa ya mencionada-, dirigida hacia la persona de Alejandro Encinas, quien tuvo que luchar ya desde entonces contra el resquebrajamiento de su propio partido, el PRD con el franco apoyo de las fuerzas perredistas de Bautista, sobre todo en Nezahualcóyotl y el oriente de la Ciudad de México, hacia el PRI de Eruviel, y el protagonismo y carisma del Sr. Peña, lo cual dio como resultados algo que no señalaban las encuestas, que consideraban  pocas posibilidades de triunfo para el candidato opositor más fuerte Alejandro Encinas pero que pronosticaban una elección más o menos competida donde el PRI se alzaría con la victoria.
Pero entonces como ahora, se les pasó la mano y con la enorme cantidad de recursos y corruptelas, lograron que el candidato oficial se alejara de su más cercano seguidor por casi 20 puntos porcentuales, lo cual de ninguna manera demostraba las verdaderas simpatías y tendencias de los mexiquenses.
Pero claro fueron otros tiempos, las cosas ahora son radicalmente diferentes.
El gobierno de Eruviel Ávila es y ha sido  mediocre, y el de su impulsor el Sr. Peña resultó en un tremendo fracaso por lo que las simpatías por el partido oficial se redujeron considerablemente. Hoy por hoy un 80 % de la ciudadanía mexiquense ha manifestado claramente su deseo por que cambien  las siglas de quien gobierna – artos del PRI -  y  que por más de 80 años han dominado ese tan importante territorio del entorno nacional.
A nivel de todo el país, de sur a norte y de oriente a poniente, menos del 10% de la población aprueba el trabajo realizado por Peña Nieto, el resto, la gran mayoría lo desaprueba. Esto no tendría que ser diferente en el Estado de México porque al final de cuentas  es el bastión y el lugar de origen del señor de los Pinos. Estamos hablando del lugar donde fue gobernante -con mejores resultados en apariencia, que sus resultados actuales-, el lugar donde está el enclave Atlacomulqueño, la Meca -desde hace ya 8 décadas- del priismo nacional.
No hay forma que puedan darse el lujo de perder su bastión más importante, porque perdiéndolo, el final de la gran batalla, y su derrota total estaría prácticamente anunciada.
Con esos antecedentes, procederemos al análisis de los actores que juegan roles importantes en esta contienda que esta ya a menos de un mes de volverse realidad.
Comencemos por otra de las grandes frases de los antepasados de estos caciques de Atlacomulco que se han vuelto celebres.
TODO LO QUE SE PUEDA COMPRAR CON DINERO, RESULTA BARATO.
Más ahora que además de los cuantiosos recursos que les otorga el Estado Mexicano para realizar sus campañas, se tienen también los recursos mal habidos de las arcas estatales, del mismo Estado de México así como de otros estados, como ha sucedido en el pasado, lo que significa que ahora se dará con mayor fuerza. Porque no nos olvidemos como recursos principalmente provenientes del Estado de Veracruz, gracias a la generosidad de un señor ya tras las rejas, Javier Duarte, y de su maestro y guía Fidel Herrera, y claro los recursos que ahora se han convertido en una pesada deuda para el Estado de Coahuila, que generosamente aporto Humberto Moreira a las campañas mexiquenses hace ya 6 años y claro a la campaña del Sr. Peña en su caminar hacia la mansión de los pinos.
Pero ahora, por si esto no fuera ya mucho o al menos suficiente, tenemos también los recursos ilimitados aportados por un Crimen Organizado siempre deseoso de estar cerca del triunfador para seguir teniendo los permisos o al menos el desentendimiento por parte del Gobierno en turno que les permita seguir lucrando a costa del pueblo mexicano.
No podemos olvidarnos que la institución más INE –ficiente–,  y claro más parcial, el INE determinó un monto de 500 millones de pesos que podrían gastar los candidatos para la gubernatura del Estado de México en una campaña de un poco menos de dos meses, y claro este monto fue rápidamente protestado por la oposición real, MORENA a la que se sumaron otros partidos pseudo opositores logrando una reducción prácticamente de un 50% de esa cantidad.
Cuando se escriben estas líneas, el siempre desconfiable INE anuncia que quien más ha gastado es Josefina del PAN con 58 millones, Del Mazo 57 y Delfina solo 25 pero estas cifras no muestran la realidad.
Además que los topes de campaña son como la Constitución, todo el mundo los viola y todos los días de esto podemos estar seguros.
Esta historia -también de horror-,  continuará....

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