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¡Es un complot! ¿otro?
Por: Juan Carlos Girón Enriquez.

El juego de la democracia supone muchas cosas, entre otras, las elementales, jugadores y estrategias para jugar. También supone la existencia de reglas y, sobre todo, tiempos.
Quien se anime a entrarle a ese juego, tendrá que aceptar que la competencia es dura y que, mientras no cambien las reglas, esta competencia será temporal al igual que el trono.
El actual presidente de México se ha encargado, varias veces, de fabricarse complots en los que se siente víctima de las fuerzas extrañas que dominan en el país. Ese discurso le ha llevado a lograr la empatía de muchos mexicanos que se condolecieron de él.
También ha sido artífice de muchos otros complots en contra de muchas otras personas, a las cuales no defenderé, porque a estas alturas del partido ya no se sabe ni quien dice la verdad o, mejor dicho, no sabemos que parte de todas las mentiras que se dicen, es cierto. La realidad es que todos mienten; el actual presidente de México tuvo que elaborar varios planes para intentar ganar la presidencia; hasta que lo logro.
Pero regresando al punto de los complots, son buenos cuando yo los hago, pero son malos cuando soy objeto del complot de los demás. Ese es el argumento de AMLO. Ahora a dado por publicar que muchos están en su contra, orquestando un plan maestro – de siete cuartillas – con la intención oscura de derrocarlo del poder. Esta afirmación tiene muchos bemoles, sobre todo porque tarde o temprano (al término de seis años en la presidencia) tendrá que dejar el poder, exista grupo opositor o no, exista complot o no, exista plan maestro o no, su plazo al frente del poder federal en México se vence en el 2024 o antes si no logra ganar en la revocación de mandato, que dicho sea de paso, es algo que no nos inventamos nosotros, sino el mismo, son sus propias reglas del juego.
Por otro lado, muchos de los planes de acción de los diversos partidos políticos en las diversas campañas electorales, incluso en precampañas inician planteando objetivos, y esos objetivos siempre serán derrocar a quien ostenta el poder. No conozco instituto político alguno que elabore un plan para ayudar a su vecino a mantenerse en el poder.
Si a lo anterior le agregamos que ese documento representa un plan de acción, no significa, en primer lugar que ya se haya concretado y que todos esos nombres y actores que ahí aparecen sean parte ya de ese bloque, porque en esas cuartillas se habla en futuro, no en presente; por si fuera poco, no tiene ni firma, ni fecha, lo que nos lleva a suponer que es o una lluvia de ideas de los opositores, una base sobre la cual trabajar, o bien, un artilugio muy elaborado para distraer a la población de los verdaderos problemas que está enfrentando nuestro país en este nuevo gobierno.
No estar a favor de la 4T es estar en contra de la 4T, eso fue lo que señaló el presidente, pero México, su población tiene derecho a disentir, a opinar, a organizarse, a trazar un mapa, una ruta, una estrategia, para buscar el logro de sus objetivos.
El panfleto de 7 cuartillas publicado por el presidente en su mañanera tiene muchos elementos de seguridad cuestionables. ¿Quién coloca una marca de agua de “confidencial” en un plan de acción?, un documento confidencial adquiere tal categoría por contener datos sensibles, información cuya publicación pueda ser contraria a lo establecido en la ley de protección de datos personales, o por cuestiones de seguridad. Pero un plan de acción, que representa una estrategia que, en términos generales, no contiene otra cosa que ideas sobre qué es lo que se tiene que hacer para lograr ciertos objetivos muy específicos, es confidencial para llamar la atención, para distraer, pero no porque en realidad lo sea.
Quien quiera que se organice para derrocar a Morena en las elecciones y para quitar a AMLO de la presidencia a través de la revocación de mandato, esta en el pleno ejercicio de sus derechos civiles y políticos. Se llama libertad de reunión, de asociación, de manifestación y derecho a votar y ser votados. La última vez que revisé la constitución política de México, esos derechos todavía estaban contemplados ahí.