EL RENACER DE NUESTRO CENTRO HISTÓRICO
MARÍA DEL MAR DE ÁVILA IBARGÜENGOYTIA *
La casa de todos los zacatecanos, es nuestra ciudad y el centro histórico, de alguna suerte forma parte esencial de nuestra riqueza y acervo cultural ya que fue reconocido como Patrimonio Cultural de la Humanidad en el año de 1993. Se trata de un sitio que cuenta con una particular traza urbana. Además de que en sus calles se suma una importante colección de inmuebles de valor incalculable. Aunque también debo decirlo y ello lo hago con toda responsabilidad, son muchas las fincas de particulares que están a punto de venirse abajo, cómo consecuencia fundamental de estar deshabitadas y haber adaptado alguna parte de ellas para el comercio.
Está claro que el Centro Histórico, no sólo alberga gran parte del patrimonio tangible e intangible de nuestra cultura, razón por la cual urge revitalizar este importante espacio de tal manera que su potencial detone sinergias entre múltiples dimensiones -cultural, social, económica y urbana- para convertirse en una centralidad vibrante en la ciudad. Concentrar un entorno único dónde convivan infraestructura del pasado y del presente.
Esto atraería un alto flujo de capital humano. En la forma de turistas, residentes, estudiantes y trabajadores entre otros, que deberían ser capitalizados por estrategias de desarrollo económico local que fortalezcan las cadenas de valor de la zona centro.
Ello ofrecería una excelente oportunidad para la cohesión social a través de estrategias que reconocen la diversidad del centro histórico y que estas aumenten su capacidad habitacional, las cuales presentan también dinámicas democráticas especiales, abren oportunidades para que funcionen pequeños laboratorios de innovación cívica, dónde sector público, privado y ciudadano exploren alternativas de colaboración innovadoras para la construcción de soluciones urbanas, ya que todas en suma, representan manifestaciones vivas de la cultura de nuestra entidad.
Es necesario visualizar esté potencial que ofrece la gran oportunidad para emprender políticas públicas, estrategias y programas para abordar retos de manera integral, más allá del patrimonio urbano que nos lleven a revitalizar las características socioeconómicas y con todo ello potenciar la cultura que eventualmente permitirá un cambio real en la urbanización.
Que nos oriente a mirar de manera adecuada a nuestro pasado y poder liberar y detonar transformaciones que den forma a un mejor futuro para nuestra ciudad. Hay que ir más allá de la simple preservación del atractivo turístico, el reto es abordar de manera integral todas las expresiones culturalmente hablando y buscar estrategias de revitalización y conservación que logren dinamizar nuestro centro hacia la modernidad, sin tocar su esencia.
Es por eso que su servidora, así como compañeras y compañeros diputados, estamos empeñados en aportar nuestra voluntad, más allá de colores partidistas, todos juntos trabajando para un solo objetivo; revitalizar la sala de nuestra casa y seguir disfrutando de nuestra ciudad cantera techada de azul.
Habremos de encontrar las mejores soluciones en reglamentos y ordenamientos para garantizar el esfuerzo interinstitucional y ciudadano que se traduzca en normas que permitan preservar las fincas que dan identidad al centro histórico cómo Patrimonio Cultural de la Humanidad.
*Diputada Local
