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Democracia Universitaria.

Por: Jenny González Arenas

La Universidad Autónoma de Zacatecas, acaba de atravesar por dos procesos democráticos que deben ser analizados en su justa dimensión porque: primero, la democracia es un principio fundamental para el desarrollo de todas las instituciones y una universidad pública no es la excepción; segundo, porque la Universidad es un ejemplo tanto al interior, como hacia la sociedad zacatecana y, porque no pensarlo, a otras universidades.
Uno de esos procesos es la elección del Comité Ejecutivo del SPAUAZ para el periodo 2023 – 2026, que ha sido un ejemplo muy importante para la sociedad de participación. El ejercicio del derecho al voto del 75 % del padrón de sindicalizadas y sindicalizados al SPAUAZ es un ejemplo para la sociedad de lo importante que es el ejercer nuestro derecho al voto como una forma de manifestarnos pacíficamente y propiciar, desde el voto, el cambio en las instituciones.
Por otro lado, el resultado es también un ejemplo de pluralidad porque, dada la forma en la que se integra el Comité Ejecutivo, el grado de participación de las y los docentes, permitió que, por primera vez en mucho tiempo, la conformación de dicho comité garantizara la representatividad, no sólo de mujeres y hombres, sino de las diversas fuerzas que participaron en la contienda de forma tal que la asignación de carteras es equitativa.
Lo anterior sienta un precedente importantísimo en todo proceso democrático, que es el valor tanto de la participación en una contienda, como de la gran implicación que tiene el ejercicio del derecho al voto libre y secreto, así como la importancia de acudir a ejercer ese derecho.
Este proceso nos obliga a todos los actores a asumir con responsabilidad los resultados, porque fue un proceso verdaderamente democrático, participativo, representativo y sin precedentes en la historia del sindicalismo universitario, que también propicia condiciones para la transformación de la manera en la que la sociedad percibe a la universidad.
Poner en su justa dimensión el proceso implica no centrarnos en la diferencia de votos, sino en la importancia que todos y cada uno de esos votos para que el resultado permitiera una conformación equilibrada del comité ejecutivo, que ya no representa colores ni planillas, ahora representa a todas y todos los sindicalizados, porque SPAUAZ hay uno y el Contrato Colectivo del SPAUAZ también es uno sólo, que nos protege a todas y todos. Es parte de nuestro compromiso social y universitario asumir la responsabilidad, no sólo de la docencia, porque la universidad es un gran actor social que está obligado a ser ejemplo para la sociedad zacatecana, a través de la juventud y a otros actores políticos.
Respetar y exigir respeto a la participación en el proceso y a los resultado emanados de éste, no es otra cosa que exigir respeto a los procesos democráticos, a la comunidad universitaria, a las y los agremiados, que tomaron una determinación el 11 de mayo, una decisión que tendría implicaciones para los próximos 3 años, así como a mediano y largo plazo, porque el precedente que se sienta en este proceso habrá de impactar en la manera de percibir y asumir a la Universidad en próximas fechas.

*Secretaria General del SPAUAZ