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Silvia Montes Montañez

Presentó el legislador la gráfica suscrita por la encuestadora "Rubrum" donde Julio César Chávez, encabeza las preferencias electorales seguido por Saúl Monreal y Ulises Mejía Haro.

JUAN MENDOZA, diputado perredista lanzó desde la tribuna del Congreso del Estado acusaciones que no deben caer al vacío porque se trata de un asunto de interés público que resurge con una medición acerca de probables candidatos morenistas al Senado de la República.
PRESENTÓ el legislador la gráfica suscrita por la encuestadora "Rubrum" donde Julio César Chávez, encabeza las preferencias electorales seguido por Saúl Monreal y Ulises Mejía Haro. La presencia del ex alcalde de Guadalupe en la medición resulta desconcertante.
UNA ENCUESTA efectuada en este mes cuando se encuentra prófugo de la justicia le provocó a Mendoza y seguramente a la mayoría de quienes lo valoren, la expresión de "surrealismo político" al seno del partido gobernante en el país y el estado.
ABSURDA la encuesta y sus resultados. Obviamente Morena no hace el menor comentario sobre la medición o sobre el protagonista acusado de homicidio doloso en contra del joven Raúl Calderón. Han transcurrido ya dos meses sin resultado alguno sobre su captura.
HACIENDO una reflexión al respecto, Juan Mendoza presentó estas tres hipótesis: O Julio ha sido extremadamente cuidadoso para ocultarse, la Fiscalía ha disminuido la intención de la búsqueda o le están brindando protección desde el oficialismo.
GRAVES las afirmaciones del diputado que exigió una investigación "tecnológica"en varias direcciones: la primera, hacia el círculo rojo de la presidencia municipal considerando que el cuerpo de funcionarios cercanos a Julio N permanece intacto, sin omitir al alcalde en funciones.
SEÑALAMIENTOS como estos deberían tener una respuesta inmediata, pero me temo que serán ignorados. La otra vertiente que sugiere Mendoza involucra a la Unidad de Inteligencia Financiera, porque es altamente probable que los familiares de Julio le hayan transferido dinero.
A LAS AUTORIDADES y al partido gobernante no les conviene hablar sobre el asunto y prefieren evadir su obligación política y moral. El delito por el que uno de sus cuadros distinguidos es acusado prescribe, según el Código Penal del Estado, en treinta años con una punibilidad de 20 a 30 años.
ANTE estos datos elementales vale la pregunta ¿Evadirá la justicia todo ese tiempo? Por lo pronto la realidad lleva a esta afirmación desde el seno del Legislativo: "Un presunto homicida encabeza las preferencias al Senado y tenemos un gobernador en el lugar 32", ambos morenistas.
EL CASO sigue presente en la memoria de los zacatecanos con evidentes lealtades al ex alcalde por parte de colaboradores que suelen manifestarlo de distintas formas, incluyendo la publicación de fotografías en redes donde exhiben orgullosamente su imagen.
JULIO N sin duda se ganó esos afectos; pero la presunción de que pudieran estarlo apoyando con recursos públicos es muy seria. Ya corren especulaciones incluso señalando con nombre y apellido a supuestos mensajeros. Es inaceptable el silencio ante las suposiciones y si Julio es inocente puede y debe probarlo.

*Periodista