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¿Se puede recuperar el ISSSTE?

Bennelly Hernández Ruedas.

Esta semana el presidente, Andrés Manuel López Obrador, presentó un informe integral de la situación que atraviesa el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE); en el sentido de impulsar un plan de acción para rescatar al organismo que, por décadas se ha visto lacerado por actos de corrupción de los gobiernos neoliberales en el poder.
Recordemos que el instituto se creó en el año de 1960, luego de entrar en vigor la Ley del ISSSTE; con el objetivo de brindar un servicio de atención médica de calidad a los empleados públicos, burócratas, maestros prestadores de servicios y sus familias, en todo el país; así como otros derechos legítimos del trabajador, como es su seguridad social, la jubilación y las pensiones.
Aunque este organismo descentralizado, nació con expectativas de brindar mayor bienestar a los trabajadores mexicanos, la realidad es, que con el paso del tiempo y de los malos gobiernos de la derecha, el sistema de salud se fue deteriorando en su operatividad por diversos abusos y corruptelas, hasta quedar arruinado.
De acuerdo con el informe expuesto por el ejecutivo federal, en los últimos 20 años, los gobiernos del PRIAN privatizaron la mayoría de los servicios de la institución; lo que derivó en saqueos de las instalaciones que, paulatinamente, provocó severas afectaciones a la calidad de los servicios médicos.
Para darnos cuenta del grado de artimañas de las pasadas administraciones, la privatización de los servicios se fue ejecutando por partes y diferentes flancos; por ejemplo, en el caso de equipos como ambulancias y camillas, se comenzó a contratar empresas que brindaran el servicio, siendo que éstas estaban vinculadas directamente con servidores públicos.
Es decir que, empresas particulares estuvieron utilizando al personal médico y administrativo, así como las instalaciones, equipos y hospitales del ISSSTE, para otorgar servicio a los derechohabientes.
Estos actos de corrupción generalizada, trajeron como consecuencia otras problemáticas graves, como el desabasto de medicamentos, ya que no se tenía un control o una buena administración de los inventarios de las farmacias; lo que propiciaba otras situaciones como el robo hormiga de los medicamentos.
Lamentablemente, estos problemas ahora se ven como mínimos, ante la lista de daños y perjuicios que arrastra el ISSSTE; como es el deterioro y en otros casos abandono de las unidades médicas; la falta de equipo médico, como son Rayos X portátiles, ecocardiógrafos, tomógrafos, electroencefalógrafos, entre otros.
Con el paso de los años también se ha llevado un desmantelamiento de la plantilla de médicos y enfermeras; tras dejar de contratar a personal médico y especializado, pese a las demandas de salud de la población; además de ejecutar muy poca inversión para la construcción de hospitales. Incluso, cuatro hospitales edificados en el sexenio anterior, fueron financiados con dinero de particulares, a un sobreprecio diez veces mayor del costo real.
Es por ello que urgía revisar y valorar las alternativas que se puedan llevar a cabo para el rescate del instituto; soluciones que permitan favorecer la atención a los derechohabientes; al agilizar los procesos administrativos; optimizar el ejercicio de los recursos; al tiempo de atender el abandono de instalaciones.
Este proyecto será coordinado por la secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez Velázquez, con el propósito de lograr el apuntalamiento del instituto; la dignificación de los servicios que ofrece al trabajador y; lo más importante, volver a nacionalizar el ISSSTE.
Haciendo público, lo que ya era público.