Dr. José de Jesús Reyes Ruiz
CORONAVIRUS
Que pasara con esta nueva PANDEMIA
I parte
Para documentar mi pesimismo… y el de los demás
En los últimos tiempos, la humanidad ha sido testigo de la aparición de nuevas enfermedades - cosa que no pasaba antes - pues se estudian mejor las enfermedades que habían estado ahí a través de la historia, y de tiempo en tiempo la humanidad era afectada en forma pandémica por el azote de enfermedades que ya habían estado ahí antes como la peste negra – peste bubónica producida por una bacteria llamada Yersinia pestis, que usualmente se encuentra en las pulgas y piojos de algunos roedores - por eso es que se le adjudicaron a las ratas y sus pulgas como los agentes transmisores de la bacteria - que había existido a través de los tiempos pero que por una condición o por otra, las condiciones de la sociedad en su momento - la edad media - donde la enorme falta de higiene de entonces y los movimientos de la humanidad hicieron posible una pandemia que afecto a gran parte de la sociedad de entonces predominantemente en Europa.
Bien vale la pena recordar, para no caer en pánico por lo que sucede con la situación del coronavirus, que en aquellos tiempos la mortalidad de la peste negra era de entre un 60 a un 90%, es decir que de 60 a 90 personas que entraban en contacto con este enfermedad y se contagiaban fallecían irremediablemente, y que aún hoy en día con la existencia de antibióticos específicos para este problema la mortalidad sigue siendo de un 10 a un 20% con la salvedad de que las condiciones de higiene han cambiado radicalmente y es prácticamente imposible fuera de las naciones - con un alto grado de subdesarrollo - que existen brotes de este tipo de enfermedad.
Frente a estas circunstancias tampoco podemos olvidad de la llamada INFLUENZA – GRIPA – ESPAÑOLA que azoto a la humanidad a inicios de siglo XX provocando la muerte de alrededor de 50 millones de personas en todo el mundo, mucho más que la suma de las personas que perdieron la vida en la primera y segunda guerras mundiales juntas.
Como se ha dicho hasta el cansancio, desconocer la historia nos hace repetirla en sus elementos negativos, por ello es importante recordar para entender lo que está sucediendo, pero sobre todo lo que está por venir en el caso del coronavirus, a dos epidemias previas que han azotado a la humanidad, el caso de la peste negra acontensia durante las épocas medioevales y la gripa española a inicios del siglo XX específicamente en 1918, donde ambas devastaron a la humanidad cuando no se tenían – como hoy en día - los elementos para entenderlas y entendiéndolas actuar en consecuencia es decir atenderlas como es necesario.
Como comentamos previamente el caso de la peste negra – actualmente conocida como peste bubónica – el germen causal era una bacteria que era transmitida al ser humano por los piojos en forma directa donde un intermediario importante eran los roedores – específicamente las ratas – que en consecuencia existían predominantemente por la falta de higiene y de conocimientos sobre el tema de las que la humanidad de entonces era presa.
Esta es una enfermedad que ha existido en todos los tiempos y que si en el medioevo se presentó como una pandemia fue por circunstancias específicas de la movilización y los ritmos migratorios de entonces que encontraron a la Europa de entonces - con una terrible falta de higiene - el piso fértil para crecer y propagarse.
El caso de la gripa española es diferente porque aun hoy en día no se han encontrado el germen que la provoco, entendemos que posiblemente se trató de un virus, pero también pudo haber sido una bacteria, y la enorme mortalidad que ocasiono se debió no a la patogenisidad del germen causante sino a trastornos del sistema inmunológico de los seres humanos de esos tiempos, y el elemento central en su propagación fue el final de la primera guerra mundial donde los ejércitos se movilizaron y llevaron consigo la enfermedad, pero además los soldados fueron afectados en mayor medida porque la situación emocional y posiblemente la utilización de drogas altero un sistema inmunológico que lejos de defenderlos de la enfermedad les ataco como muchas otras de las enfermedades autoinmunes.
La gripa española no nació en España, ciertamente fue la nación que más la sufrió porque mato a 8 millones de españoles, pero países como los Estados Unidos la contaminación fue mayor ya que afecto al 29% de la población pero solo murieron ahí medio millón de seres humanos, se piensa que afecto más a España por que en su posición como país neutral permitió el ingreso de personas de todo el mundo de uno y de otro lado del conflicto, pero hay quien asegura que se trató de un virus y que también se originó en el oriente, específicamente en China.
Sea como hubiera sido se trataba de una enfermedad también conocida a través de la historia de la humanidad que encontró dadas las circunstancias especiales de los tiempos la forma de propagarse y de incrementar su patogenicidad (su malignidad)
Ahora bien, el problema que vivimos en los tiempos recientes es que virus que afectan a otras especies animales, encuentran el camino – que en otros tiempos no existía – de afectar también al ser humano y es esto lo que tendría que tenernos preocupados por que al menos es algo que no existía antes o tal vez no era algo que la humanidad con sus recursos tecnológicos hubiera podido entender entonces.
EL VIH fue el caso más evidente en finales del siglo XX donde en África se descubrió que un virus que afectaba a los primates y que ocasionaba una INMUNODEFICIENCIA que finalmente terminaba con sus vidas, se propago al ser humano cosa difícil de entender y de aceptar.
Existe quien asegura que esto fue provocado por la mano del hombre en campos experimentales de países del primer mundo en África pero pensados desde el primer mundo, específicamente de los Estados Unidos, fueron los que experimentaron con elementos biológicos sobrepasando los límites de la bioética y dando como resultado un virus que NUNCA HABIA AFECTADO AL SER HUMANO y que comenzó a transmitirse directamente por los fluidos naturales del ser humano principalmente a través de la relación sexual sobre todo si implicaba una violencia antinatural, por lo que afecto inicialmente con mayor intensidad a aquellos que tenían relaciones homosexuales, pero que después afecto también a los heterosexuales con relaciones de promiscuidad y sin la protección adecuada de los preservativos que desde entonces se convirtieron en la mejor forma de impedir la transmisión del virus que ya en el organismo provocaba un síndrome de inmunodeficiencia con una elevada mortalidad que en algún tiempo fue de un 100% de quienes adquirían la enfermedad pero que actualmente puede ser controlado y existen casos de curación – aunque aislados – con los nuevos tratamientos anti retrovirales.
En nuestro país tuvimos no hace muchos años la experiencia de una mutación del virus de la influenza, el H1 N1 que provoco una respuesta de proporciones nunca antes vista, que paralizo a la sociedad, que provoco la inmovilización de grandes sectores, que acabo por un tiempo con los sitios de recreación – teatros, cines escenarios deportivos etc. – vamos la gente tenía que evitar incluso las zonas donde hubiera convivencia masiva como los centros comerciales los restaurantes etc.
Por fortuna entendimos que ni el virus era tan contagioso, y que si bien la mortalidad era más elevada de la de la influenza por virus tradicionales, no era tan elevada como el de la gripa española. Pronto hubo tratamiento adecuado – el oseltamivir (tamiflu) – y más tarde una vacuna que si bien no evitaba el contagio si minimizaba la posibilidad de la producción de un cuadro respiratorio severo que pusiera en peligro la vida del paciente.
La respuesta de nuestras autoridades – ahora lo sabemos – fue exagerada sin lugar a dudas, las pérdidas económicas entonces fueron de hasta un punto del producto interno bruto, pero al fin superamos el problema al comprenderlo mejor.
Y ahora con el coronavirus, ¿Qué hay que saber? ¿Qué es lo que va a pasar? Por el momento entendemos que es un virus que nuevamente se transmite de un animal – aún se desconoce cuál – al ser humano, y que nace en zonas densamente pobladas de China CON UN MUY ALTO NIVEL DE CONTAGIOSIDAD, pero que en realidad tiene una baja mortalidad que hasta ahora se ha comprobado no mayor del 3% es decir solo 3 de cada 100 casos morirá por esta enfermedad, pero tenemos que entender que para cuando estas líneas salgan a la luz, habrá cerca de 1000 personas fallecidas en todo el mundo, lo que significa que existen aproximadamente 35 mil personas contagiadas.
Que la infección llegara a México de esto no hay duda, que se difundirá en todo el mundo, tampoco, actualmente han resultado negativos dos casos en Tamaulipas, 3 en Jalisco, dos en colima y uno se encuentra bajo sospecha y aislado en la ciudad de México, en Latinoamérica se ha confirmado un caso en la Argentina, y en los Estados Unidos han diagnosticado ya una docena de casos y uno falleció en consecuencia, y claro todos los casos tienen el origen en alguien que proviene de la China.
Esta historia continuara.
