Nota Espe_culera
Por Syres
EL CHIMOLTRUFIO
En una de las mañaneras de esta semana, el Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, aseguró que no perseguiría a quienes estén involucrados con García Luna, simplemente les hizo una “recomendación afectuosa” a que se serenen, que se tranquilicen, que el que nada debe pues nada teme, y que cooperen o que reflexionen, porque cambiar de opinión es de sabios, y sobre todo pues habrá que aceptar errores y no caer en auto complacencias, al fin y al cabo todos nos equivocamos pues somos seres humanos y si se trata de asuntos judiciales en Estados Unidos, pues coadyuvar, al cabo lo bueno es que ahí les reducen penas si cooperan diciendo lo que vieron y lo que saben, siempre y cuando “cuentan cosas”.
Pero, sin lugar a dudas, cercanos -y retirados- de García Luna, Secretario de Seguridad Pública durante el sexenio de Felipe Calderón (FECAL por sus siglas), deben estar muy preocupados por el panorama reciente. Conscientes también, de que nuestro presidente se comporta como la chimoltrufia, pues “como dice una cosa, dice otra”, nomás recordemos que al poco tiempo de ser electo, aseguró que su gobierno no investigaría a personajes de la administración actual acusados de corrupción, pero aclaró que “hacia adelante no habrá ningún perdón”.
La declaración fue conocida en los medios de comunicación como “borrón y cuenta nueva”, reconociendo que se trataba de un “perdón a corruptos” con la idea de que se acabara la historia trágica, horrenda, de corrupción, de impunidad, que se acabe la política anti popular, entreguista y que comenzáramos una etapa nueva, para que ya iniciara una nueva historia.
Pese al ámpula que levanto tal declaración en noviembre ante la sociedad que nos escandalizamos porque los corruptos y la clase política que es lo mismo, andarían gastando lo robado al presupuesto sin mortificación alguna, pero afortunadamente, hoy vemos que no será así, y que si es necesario, desde Estados Unidos de América y gracias al proceso judicial que enfrentó el Chapo Guzmán en aquel país del norte, muchas cabezas rodaran por el tema del soborno y la corrupción que nos ha tenido azolados las últimas décadas, y que posiblemente, hábilmente, nuestro Presidente este permitiendo políticamente que la justicia se les aplique, pero también sabrá lavarse las manos bajo el argumento de que es el vecino país quien los busca pues el repite y repite en las entrevistas, que iniciará procesos porque tampoco le gusta hacer leña del árbol caído.
Lo negativo será que de alguna forma se verá afectada su credibilidad, pues pese a sus problemas de comunicación, y a que cuando se le pregunta algo contesta otra cosa 20 minutos después, los mexicanos no sabremos que terrenos pisamos, pues nos salió indeciso el mandatario.
