Estímulos al Desempeño del Personal Docente.
Por: Juan Carlos Girón Enriquez[1]
Una vez mas, los docentes universitarios tienen un punto de encuentro ante la Convocatoria del Programa de Estímulos al Desempeño del Personal Docente que, como su nombre lo indica, debería ser el reconocimiento al trabajo que se realiza en las aulas de la Universidad Autónoma de Zacatecas.
Cual es la sorpresa que cada año, con cada convocatoria, las reglas cambian, al arbitrio de la autoridad responsable, unas veces, dándoles mas importancia a unos trabajos, otras veces dándoles mas importancia a otros, sin justificación alguna para los cambios.
El objetivo del programa, es contribuir a elevar la calidad de la educación superior a través de estimular el desempeño del Personal de Tiempo Completo en el ámbito de la academia. En este sentido, resulta imperante que se analicen ciertos criterios de evaluación que distan mucho de estimular la academia y van mas enfocados a la investigación, ámbito que tiene otros espacios y otras convocatorias que le reconocen.
Desafortunadamente, como en muchas otras convocatorias, el manejo discrecional de los recursos así como de las plataformas de evaluación hacen que los programas de estímulos se desacrediten y los profesores pierdan interés en su participación, lo que a la larga beneficia a unos cuantos que son los que, algunas veces sin merecerlo, se lleven buena parte de los recursos.
Sin menospreciar el trabajo de los Investigadores que pertenecen al Sistema Nacional de Investigadores, ellos participan en una convocatoria que les brinda apoyo para realiza investigación, por lo que ese trabajo el asignarle una puntuación desproporcionada en la convocatoria de docencia resulta en desventaja para aquellos que centran su labor en la docencia y no en la investigación. Siendo realistas y objetivos, es cierto que todos los docentes estamos contratados para realizar investigación, pero no es la misma realidad la de un docente de posgrado que tiene un grupo de 20 personas al semestre, que los docentes de licenciatura que trabajan con 4 grupos de 35 alumnos por semestre, la carga docente frente a grupo limita la capacidad humana de realizar investigación, por ello es que el fuerte de docentes en SNI se encuentran en centros cuya población estudiantil es menor, que en aquellos centros en donde la cantidad de alumnos por grupo supera los 30 o 35 alumnos teniendo que cumplir con 20 horas semana mes frente a grupo, lo que en ningún momento es comparable tener 20 alumnos por semestre a 120 o en ocasiones mas alumnos por semestre, situación que no se reconoce y tampoco se valora de manera equitativa entre los profesores universitarios.
Por otro lado, genera desconfianza en los docentes que el sistema de captura de la evaluación en ocasiones funcione, en otras ocasiones no, que a veces aparezcan el máximo de puntos y que en otras ocasiones no, inclusive que mientras más y mas documentos se capturan no se ven reflejados los puntos en los rubros correspondientes y tampoco se ve incrementado el rubro de calidad, porque se desconoce cual es el criterio de la autoridad para asignar puntos de calidad o no a tales o cuales labores, lo que complica de sobremanera a los docentes el saber que trabajo tienen que hacer a lo largo del año porque al final, la convocatoria y el modelo de evaluación le asignaran puntos a una cosa o a otra de manera arbitraria, por lo que se puede hacer mucho trabajo académico que no sabemos si servirá o no servirá.
Pueden tomarlo como un reclamo, o como una crítica constructiva, pero mientras no se transparente el ejercicio de los recursos del programa de estímulos al personal docente, o mientras no se tenga claro el modelo y el criterio de evaluación, éste seguirá siendo un programa que seguirá dando dolores de cabeza tanto a autoridades como a docentes universitarios.
[1] Docente Investigador de la Unidad Académica de Derecho de la Universidad Autónoma de Zacatecas. E-mail: giron705@hotmail.com
