Skip to main content

Confianza entre padres e hijos
Por: Gicela Andrade Ruvalcaba

¿Cuántas veces confiamos realmente en nuestros papás? Muchas veces el hablar con los papás resulta difícil para los jóvenes, en gran parte por la diferencia de ideologías qué hay entre las generaciones, mismas que son causadas por la manera en las que se educan, y el contexto social que se vive.

La mayoría de las veces resulta difícil romper la línea entre amistad y paternidad, ya que los padres suelen tener la idea de que solo son guías, modelos y autoridad moral de sus hijos, y no buscan crear un lazo que les permita tener confianza y mostrar los sentimientos de ninguna de las dos partes.

Los temas “sensibles” que parecen o pueden resultar difíciles de tratar suelen varían, como la sexualidad, la orientación sexual, creencias religiosas, ideologías políticas, entre muchos otros. Debemos parar de juzgar y creer que por ser menores que nosotros sus opiniones no valen y por ende minimizar o desvalidar lo creen y dicen.

Es menester que aprendamos a abrirnos y a tratar de escucharnos mutuamente, hay que creer en nuestros hijos y darles la oportunidad de demostrarnos de lo que son capaces, dejarlos abrirse con nosotros ¿y por qué no? Abrirnos nosotros con ellos, crear un diálogo para cada decisión y tema de conversación que sea importante para cualquiera de las dos partes, y dejar atrás el tabú y la educación tradicional con la que fuimos educados.

Nuestros hijos no son nosotros, y no hay dejarles caer un peso que no les corresponde, hay que dejarlos ser libres, dejarlos crear su propia personalidad, vida y futuro, sin dejar de apoyarlos y ayudarles en lo que sea necesario.