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La ausencia de la Guardia Nacional

Por: Claudia Edith Anaya Mota

Zacatecas sigue siendo tema entre columnistas y páginas centrales de los diarios nacionales y no por buenos motivos. La violencia que se hace presente cada día, nos vuelve un referente de la escalada de ataques a la ciudadanía y a nuestros policías. Pareciera que no hay fórmula ni acción de los gobiernos en sus tres niveles que puedan evitarlo o al menos, bajar su incidencia.

Es claro que para quienes vivimos en Zacatecas, los enfrentamientos armados entre integrantes de grupos delictivos está en la esquina de nuestras casas. Estos hechos no se dan en comunidades alejadas, ya están presentes también en la capital y hacen gala de sus atrocidades ante los ojos de nuestras autoridades. Basta con que recordemos aquel fatídico 7 de enero de este año.

Este fin de semana pasado tuvimos un registro de al menos, doce personas muertas, además de cinco personas gravemente heridas y cuatro jóvenes privados de la libertad, que fueron sustraídos con violencia.

Fresnillo sigue siendo el escenario de ataques con armas de fuego; en la comunidad de Beleña, dos grupos armados rondaron el parque de béisbol de una empresa minera y cuando se encontraban a corta distancia de un grupo de trabajadores, les dispararon sin aparente razón. Murieron dos personas en el sitio, seis personas fueron trasladadas a diferentes hospitales y una más, murió en el trayecto.

La asociación civil “Causa en Común”, alertó que Zacatecas es la entidad federativa donde se llevan a cabo el mayor número de masacres y donde más policías han perdido la vida a consecuencia de atentados letales perpetrados por el crimen organizado. Hasta el 1 de junio, sumaban 25 policías asesinados.

La propia agencia de noticias internacionales INFOBAE de origen argentino que tiene una importante presencia en Sudamérica y México, ha dado puntual seguimiento a los ataques armados que también están viviendo de manera reiterada, algunos municipios de Zacatecas: comandancias baleadas con armas de grueso calibre que hasta el momento y afortunadamente, no han dejado víctimas mortales, sino daños materiales considerables.

Y ante estos hechos cabe la pregunta: ¿Y la Guardia Nacional? ¿Dónde están los 2004 elementos que vigilan el territorio zacatecano en actividades de prevención o contención? Lo que sí sabemos es que sus integrantes llegan al lugar de los hechos cuando solo quedan los cuerpos, el dolor y el miedo.

Somos testigos de que la Guardia Nacional no ha podido disuadir, arrinconar o detener a los criminales que tienen alto poder de fuego y disrupción. La Guardia Nacional parece estar en todo, menos en lo importante. Está deteniendo migrantes indocumentados en la frontera sur, vacunando, repartiendo medicamentos, organizando concursos de Tik Tok.

De muy poco ha servido la buena intención del Plan Zacatecas II para terminar con este ambiente de guerra que estamos padeciendo. De poco nos servirá la construcción más cuarteles de la Guardia Nacional y la presencia de más elementos para nuestro Estado, si van a seguir con la misma línea: evitar enfrentamientos y que los delincuentes hagan lo que quieran. En medio, quedan las familias, cada vez con menos esperanza y confianza para recuperar la paz.

*Senadora de la República.