Dr. Pablo Quezada*
México vs EUA
I. Fentanilo: La nueva cara del narcotráfico
En los últimos años, el fentanilo ha revolucionado el panorama del narcotráfico por su alta rentabilidad y letalidad:
· Es un opioide sintético 50 veces más potente que la heroína.
· Su producción es más sencilla y barata, ya que se fabrica en laboratorios clandestinos usando precursores químicos provenientes principalmente de China e India.
· A menudo se mezcla con otras drogas (como cocaína, heroína o pastillas falsificadas), lo que aumenta el riesgo de sobredosis sin que el consumidor lo sepa.
Según datos recientes, más de 70,000 muertes al año en EE.UU. se deben a sobredosis por fentanilo. El Cártel de Sinaloa y el CJNG son los principales productores y exportadores de esta droga desde México hacia EE.UU.
II. Violencia en México: Un país rehén del crimen organizado
El narcotráfico ha desencadenado una espiral de violencia extrema en muchas regiones de México. Esto se debe, en parte, a la lucha entre cárteles por rutas y territorios estratégicos.
Principales consecuencias:
· Homicidios dolosos: Muchos de ellos relacionados con el crimen organizado. México ha tenido años con más de 30,000 asesinatos.
· Masacres, desapariciones y desplazamiento forzado de comunidades enteras en estados como Michoacán, Guerrero, Jalisco, Tamaulipas y Zacatecas.
· Ejército y Guardia Nacional han sido desplegados, pero sin resolver el problema de fondo. Muchas veces actúan como contención, no como transformación.
Además, hay una creciente presencia de cárteles locales o fragmentados, lo que dificulta la negociación o el combate centralizado.
III. Corrupción e impunidad: El otro combustible del narco
Una de las mayores barreras para combatir eficazmente el narcotráfico es la corrupción institucional en México:
· Policías municipales, estatales y federales, funcionarios y hasta jueces han sido infiltrados o cooptados por el crimen.
· Muchos casos de detención de capos o decomisos no resultan en condenas debido a fugas de información o manipulación judicial.
· La impunidad supera el 90% en delitos relacionados con crimen organizado, lo que fortalece el control territorial de los cárteles.
Este contexto también ha generado el desgaste del Estado de derecho y una crisis de confianza en las instituciones de seguridad y justicia.
IV. El tráfico de armas: El flujo inverso que fortalece al narco
Estados Unidos tiene una de las legislaciones más permisivas en el acceso a armas de fuego. Esto ha facilitado que los cárteles mexicanos se armen hasta los dientes.
Características del tráfico de armas:
· Son compradas legalmente en EE.UU. (muchas veces mediante prestanombres) y cruzan ilegalmente a México.
· Muchas de las armas decomisadas en México provienen de Texas, Arizona y California.
· Se trata de armas de alto poder: fusiles de asalto, ametralladoras, rifles Barrett, lanzagranadas.
Estas armas aumentan la capacidad de fuego de los cárteles, lo que eleva la violencia, incluso por encima del poder de las fuerzas del Estado mexicano.
V. Políticas bilaterales: Cooperación entre tensiones
Plan Mérida (2008–2021):
· Fue una estrategia de cooperación basada en asistencia técnica y militar de EE.UU. a México.
· Enfocada en el combate frontal al narcotráfico, pero criticada por enfocarse más en armamento que en el fortalecimiento institucional o prevención.
Marco Bicentenario (desde 2021):
· Busca un enfoque más integral: salud pública, justicia, prevención y desarrollo social.
· Sin embargo, enfrenta desafíos por desconfianza política, tensiones diplomáticas y diferencias de enfoque (por ejemplo, el papel del ejército en México).
Tensiones actuales:
· EE.UU. presiona para que México haga más contra el fentanilo, mientras que México exige que EE.UU. controle el tráfico de armas y reduzca su demanda interna.
· A pesar de la retórica, ambos países se necesitan mutuamente para abordar un problema que ningún lado puede resolver por sí solo.
En resumen
El narcotráfico entre México y EE.UU. es un fenómeno interdependiente y transnacional. Se sostiene sobre tres pilares:
1. La demanda estadounidense de drogas.
2. La producción y control territorial de los cárteles mexicanos.
3. El tráfico de armas desde EE.UU. a México.
Frente a esto, no basta con operativos ni discursos: se requiere una estrategia conjunta, sostenible, honesta y multidimensional. Mientras no se aborden las raíces del problema —desde la desigualdad y corrupción hasta el consumo y la cultura de la violencia—, los cárteles seguirán operando con ventaja.
Dr. en Educación