Skip to main content

Dra. Sonia Angélica Ruiz
TRAMPAS QUE INACTIVAN EL METABOLISMO
ESTRÉS

¿QUE ES EL ESTRÉS?
Estrés como concepto surge en la década de 1930, cuando un joven austriaco de 20 años de edad, estudiante de segundo año de la carrera de Medicina en la Universidad de Praga, Hans Salye, hijo del cirujano austriaco Hugo Salye, observó que a todos los enfermos a quien estudiaba, indistintamente de la enfermedad que padecían, presentaban síntomas comunes y generales: cansancio, pérdida del apetito, baja de peso, astenia, (debilidad o fatiga) etc. Le llamó mucho la atención y lo denominó “Síndrome de estar enfermo”, una especie de tensión emocional física y/o mental, que más tarde llamó estrés, donde todo nuestro sistema hormonal y nervioso se ve afectado. Cuando hay estrés se produce un exceso de la hormona cortisol, de hecho llamada la hormona del estrés.
La hormona cortisol se produce en las glándulas adrenales que están arriba de cada uno de nuestros riñones. Es una hormona que prepara al cuerpo para huir o para pelear, fue diseñada para poder sobreponernos a una situación peligrosa, utilizando el máximo de nuestro esfuerzo físico y mental. Es decir, se nos presenta una situación que nos provoca estrés, producimos cortisol y éste nos produce unos cambios internos que nos ayudan a sobre vivir a la supuesta amenaza; nos sube la presión arterial por si hay que correr o pelear, nos aumenta la glucosa para que las células tengan suficiente energía para combatir la amenaza. Si no produjéramos cortisol ante el estrés, no se nos subiría la presión y no se nos elevaría la glucosa, de tal manera que con la presión y la glucosa registrada antes del estrés, no sería suficiente para sobrevivir al ataque.
Cuando la fuente del estrés es de corta duración, por ejemplo una mala noticia, los niveles de glucosa aumentan debido al cortisol y al no ser consumida por las células, la glucosa se convierte en grasa, no olvidemos que la glucosa es la fuente de energía principal de todas las células de nuestro cuerpo, pero cuando no se utiliza y está acumulada, el cuerpo la convierte en grasa para almacenarla como fuente de energía. De aquí que el estrés produce un exceso de glucosa en la sangre a través del cortisol y este exceso de glucosa termina depositándose en nuestra cintura, caderas y abdomen en forma de grasa.
El origen del estrés puede ser externo o interno, lo cual significa que una infección o enfermedad interna del cuerpo también produce grandes cantidades de cortisol. El cortisol que produce el estrés tiene otras manifestaciones como deprimir nuestro sistema inmune, las personas bajo estrés se enferman con facilidad y muy frecuente, causar pérdida de la memoria o concentración. Por eso, cuando estamos estresados no podemos pensar claramente, afecta nuestro sistema digestivo y nos produce acidez estomacal, reduce los niveles de oxígeno, lo cual agrava el metabolismo. Todo lo que nos reduzca el estrés nos aumentará el metabolismo y nos ayudará a adelgazar. (una buena pareja, un mejor trabajo, unas vacaciones, etc.). Una buena forma de saber si el estrés nos está afectando, es observando cómo es la calidad de nuestro sueño, cuando tenemos grandes cantidades de cortisol en la sangre, es difícil conciliar el sueño, o es poco profundo y al levantarnos lo hacemos ya cansados. ¿Qué tal es tu calidad de sueño? Cuando hacemos ejercicio moderado, de 30 a 45 minutos, el cuerpo elimina grandes cantidades de cortisol a través del hígado y te permitirá dormir bien.
MALA DIGESTION
Casi es de cajón pensar cuando vemos a alguien con sobre peso u obesidad que padece de mala digestión y que por lo tanto tendrá acidez estomacal, reflujo, flatulencias y estreñimiento por una mala digestión, lo cual, es otro de los factores que reducen el metabolismo.
Los alimentos empiezan a digerirse desde que nuestra saliva entra en contacto con ellos al ingerirlos, luego en el estómago, el cuerpo utiliza unas enzimas y unos ácidos muy poderosos que cuando funcionan bien, logran romper hasta el más duro de los alimentos. La digestión luego continúa a través del intestino donde el ambiente en vez de ácido se torna alcalino y eso termina de digerir todo aquello que no se digirió. Finalmente, en la última parte del intestino delgado, los nutrientes son extraídos de los alimentos que ya han sido ablandados y descompuestos molecularmente por el sistema digestivo. El proceso tarda de 12 a 16 horas en completarse. Cuando la persona padece estreñimiento tarda más.
Una manera de subir el metabolismo y bajar de peso es mejorando la digestión y hay varias ayudas que funcionan como: tomar mucha agua, usar enzimas digestivas para digerir carbohidratos, proteínas y grasas. Reducir los carbohidratos refinados. Algo muy importante y de mucha efectividad es no mezclar alimentos que no combinan bien, por decir, frutas y queso, porque la fruta se fermenta cuando se combina con la proteína como carne, queso o huevo, todo lo que se fermente, producirá gases, además lo fermentado no puede ser utilizado por el cuerpo y tienden a reducir el metabolismo en lugar de aumentarlo. La mala digestión, producirá una mala absorción de los nutrientes y la mala absorción de los nutrientes nos lleva a un estado de muy poca energía, con un reducido metabolismo.