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Dar Vida a otra Vida

Mayela Pulido

Hace tiempo que no escribía, consideré que ya no era necesario, sin embargo existe la necesidad constante de saber, de crear de poder expresar mis sentimientos y mis pensamientos, con una finalidad humanística.
La donación aún es incierta para la sociedad, se necesita ser persistente, es para mí como una necesidad de cambiar formas de pensar y de actuar, de tomar decisiones, muchas personas, aún no saben que es un acto muy trascendente y que es muy loable, otras personas lo hacen censurable, no es tanto por la ignorancia, pero sí por falta de interés y humanismo, por falta de empatía social.
Por eso quiero continuar, porque estoy convencida de que la donación de órganos, regresa la vida a quien lo necesita, que renace, que tiene una segunda oportunidad de vida, y además una vida digna, con calidad!
Es por eso que los que estamos a favor de la donación, queremos sembrar para cosechar y para poder cambiar vidas, poder decir que puse mi granito de arena y así ayudar a la humanidad.
Yo solo quiero orientar para que podamos decidir en un momento crucial de nuestra vida.
No me ha sido fácil concientizar y hacer que las personas se humanicen, que las que tomaron la decisión de ser donantes, su familia la respeten.
Si por lo menos entendiéramos la importancia de donar y, de dar vida después de nuestra vida, sabríamos el gran amor al prójimo y lo humanos que podríamos ser con una sola palabra… un sí.
Esa tan pequeña palabra, representa el gran amor del propio ser humano a la humanidad, no es por alguien especial, es por humanismo propio…
No hay palabras de agradecimiento para esas familias que aún con su gran dolor, respetan la decisión que su familiar les informó que deseaba ser donante, y, de aquellas que por voluntad propia decidieron ayudar a quienes lo necesitan.
Esperar un trasplante no es fácil, la lista de espera puede sentirse interminable. Son meses, años de revisiones médicas, de llamadas que no llegan, de sueños que dependen de un si, que parece tardar demasiado. Mientras tanto, la vida sigue, pero con pausas obligadas, con tratamientos que sostienen el cuerpo, pero no siempre el ánimo.
Es un camino difícil lleno de incertidumbre, pero también de fortaleza.
Pues detrás de cada paciente en espera, hay una historia de lucha, de días buenos, y otros que pesan demasiado, de esperanza que a veces flaquea, pero nunca se apaga.
Por eso, aunque parezca imposible, sigue creyendo, porque el día menos esperado, esa llamada llegará. Y con ella, una nueva oportunidad de vida.
Que nunca falte la esperanza, porque cada día que pasa, es más cerca ese trasplante tan esperado.
Este es mi propósito, mi intención de llegar a ustedes, busco sensibilizarlos, cambiar su forma de pensar, que seamos verdaderos humanos solidarios, que tengamos un solo propósito, hacer el bien.
La información que siempre trato de darles, es en ese sentido, no quiero herir sus sentimientos, ni hacer sentir que su dolor no es importante.
Quiero dar gracias a todas aquellas familias y seres humanos, que han dejado un gran legado y han trascendido al dejar vida, después de su vida.
Agradezco infinitamente me lean, me escuchen, y que sí haya dejado sembrada en su corazón, la semilla de la donación, que si podemos ayudar, ayudemos!
Yo creo en la donación de órganos y de tejidos, que salvamos vidas…
Sé que no puedo cambiar al mundo, pero si puedo cambiar pensamientos de muchos, y algún día el mundo cambiará…
Yo soy Orgullosa Donante de Órganos y Tejidos…