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¿QUIEN NO LO SABIA?

 

Para documentar mi pesimismo… y el de los demás

 

A unos días, casi podríamos decir horas de que Miguel Alonso dejo la gubernatura del estado, se inició una andanada de acusaciones en cuanto al diezmo y  la corrupción orquestada durante su mandato, que han sacado a la luz las formas de hacer las cosas de este personaje y de su familia. Durante toda una semana, un medio de comunicación, -el Universal-  que cumple 100 años de existencia, ha sacado en primera plana pruebas de las corruptelas que los zacatecanos conocíamos a la perfección.

 

Por fortuna, este medio impreso de comunicación ha hecho; de lo que era un secreto a voces en el plano local, un asunto de conocimiento nacional que seguramente influirá para que -primero-, no se le ofrezca un puesto en el gabinete Peñanietista, aunque conociendo a este personaje, me refiero al Sr. Peña, todo puede pasar cuando ya vimos la ratificación de Castillo después del enorme fracaso en el deporte nacional en Río, y el premio que se le otorgó al señor Zenón -mejor conocido como Zembron- por las mil y una irregularidades en la mal llamada “verdad histórica de Ayotzinapa” donde todos vimos en televisión la prueba de sus actos ilegales sembrando evidencia un día antes de darla a conocer, y llevando en forma ilegal a uno de los testigos al lugar de los hechos quien había sido -que raro -, torturado para declarar las cosas que estos señores querían hacer del dominio público como parte de la verdad histórica de Murillo Karam,  el de la frase célebre, “ya me canse".

 

Pero decir que lo que ocurrió en nuestro estado en los últimos 6 años -“6 años de promesas cumplidas”-, según el último slogan de los creativos de Miguel Alonso, era realmente un secreto a voces era; lo menos incorrecto, todo el mundo conocía, me atrevo a asegurar -las formas de hacer y deshacer de Juan-, el hermano incómodo, con la mirada complaciente y permisiva del gobernante que sabía que todo lo que se recolectaba en esa caja nada chica, iría a parar a su patrimonio para como buen político y parte de ese nuevo PRI que si sabe cómo hacer este tipo de corruptelas, vivir en la opulencia, el resto de sus días.

 

Si no es ahora ¿cuándo?, sería su filosofía para justificar ante sí mismo sus formas de actuar y las de su familia.

 

Pero vayamos por partes, porque este es un asunto que se puede desmenuzar para lograr entenderlo mejor y ver como funcionaron las formas de hacer y deshacer durante el sexenio que apenas termina.

 

Al inicio y con el objetivo de deslindar responsabilidades, eligió a su hermano Juan para que  hiciera y deshiciera dentro del sector de salud, que en las etapas iniciales era en donde él podría tener una injerencia directa, tan fue así que se le permitió nombrar a quien encabezara lo que entonces era la Dirección de los Servicios de Salud del Estado de Zacatecas, y que después se convertiría en flamante Secretaria de Salud, y para el puesto selecciono Juan, -no Miguel, el gobernador- a un compañero de escuela sin más méritos que haber sido demandado legalmente por negligencia médica, no en una, sino en las dos instituciones en donde prestaba sus servicios como Ginecólogo, en una de ellas el IMSS fue corrido y ni siquiera el hecho de que Genaro Borrego fuera su primo hermano, le salvo de perder el caso, mientras que en la otra institución pudo seguir laborando con las limitantes de un caso que nunca pudo llegar a esclarecerse legalmente.

 

De cualquier forma se sacó la lotería al ser designado al frente del sector salud, donde sabía que él y su gran amigo Juan harían y desharían a su gusto y de acuerdo a sus intereses.

 

Comentar las enormes irregularidades que ahí se dieron sería interminable, y me reservo el derecho de en el futuro armar los casos cuya documentación opta en mi propiedad. Pongo solo 3 ejemplos, primero la licitación inicial en el servicio de laboratorios en la cual resultó triunfadora una compañía inexistente sin experiencia alguna en el tema en el que resultó ganadora, en estas condiciones pusimos todo el esfuerzo en nuestras manos para, en colaboración con una de las compañías serias que habían participado en la licitación echar abajo los resultados y lo logramos con ello,  el enojo consecuente de Juan Alonso, y claro de Raúl Estrada que perdieron en este movimiento cantidades importantes de recursos, y  que los llevó a correr al administrador del Hospital General que nos había ayudado a tirar la licitación.

 

Este administrativo había estado antes como administrador general de los servicios de salud, pero un asunto obscuro, el de la adquisición de ambulancias que le costó al estado cerca de 400 millones de pesos que pudieran haberse ahorrado porque iban a ser pagados por el Seguro Popular, lo que no fue viable por las irregularidades que se exigieron desde arriba, ¿lo recuerdas Roy?, y que por más que insistió el administrativo a apegarse a la normatividad vigente, el interés por las mochadas resultó en el desastre que por fortuna tenemos bien documentado.

 

Existe mucho más, el asunto de las videocámaras que fueron pagadas a un precio casi del triple del costo de adquirirlas vía internet libremente, o peor aún el manejo de los recursos del patrimonio de la beneficencia pública.

 

Y claro aquí podremos escuchar la voz envalentonada de los protagonistas que griten y exijan, si tienen pruebas que presenten las demandas correspondientes, y claro que lo haremos, en su momento, pero no ahorita  por la sencilla razón de que no confiamos en nuestras maravillosas instituciones en donde gana quien este del lado del poder y pierde el demandante como sucedió, por poner sólo un ejemplo con el administrador de los servicios de salud en Querétaro que con las pruebas en la mano demando a una empresa que curiosamente estaba a nombre de la esposa del Secretario de Salud por la compra a un costo triplicado de camas para hospital, y el resultado fue que lo corrieron de la institución y los culpables salieron del asunto tan felices e impunes -como corresponde-, mientras que el demandante fue sometido a demandas en su contra de las que aun hoy en día no sale bien librado.

 

Es claro que estamos en un país donde quien está del lado de quien gobierna está protegido, hablando del sector salud, es claro que Alejandro Tello (quien asegura no encubrirá a nadie) es claro que ya lo hizo al nombrar como Secretario de Salud a quien había trabajado para el anterior y que le cubrirá las espaldas como el mismo se las protegerá al ex gobernador Alonso y todo ello previo acuerdo seguramente entre Miguel, su hermano Juan y Alejandro Tello y claro permitiendo que  el secretario saliente Raúl Estrada designara a su sucesor al Dr. Breña ambos ginecólogos, este segundo leal y disciplinado y discreto – no como un servidor -   mientras se mantuvo como subordinado, y que ahora recibe el premio a  su obediencia, y claro al haberse hecho de la vista floja ante las mil y una irregularidades sucedidas ahí en el sexenio que termina y que hoy en día están siendo documentadas por el universal en donde las irregularidades relacionadas a los servicios de salud representan la gran mayoría.

 

Lo que veremos ahí seguramente será un enroque donde el ex director del Hospital de la Mujer pasa a la Secretaria y el ex secretario a la dirección de este nosocomio.

 

Es claro para los zacatecanos que lo que fue al inicio del sexenio previo una oficina paralela donde se decidía absolutamente todo, sobre todo en cuanto a compras y diezmos que desde el inicio se convirtieron en mochadas por arriba del 25% -cómo me lo declararon muchos proveedores-, rápidamente se extendió a otros terrenos y no solo al de la salud, y llegó el momento en que todo prácticamente todo en cuanto a licitaciones, compras, adquisiciones etc., en todos los rubros se decidía en esa oficina paralela bajo el conocimiento del gobernante, y la mirada de la ciudadanía, y no quedo más que en aceptar las cosas como eran y reservarse su coraje para los momentos de votar intentando castigar a los culpables con su voto en contra.

 

La sorpresa seria que ni ahí contó su voto, la división de las izquierdas y la compra de la voluntad popular, es decir del voto, la coerción ejercida no solo en las instituciones gubernamentales donde se encuentra un porcentaje importante de la ciudadanía y de los votantes en consecuencia, con sus pirámides en donde se coacciona el voto, se extendió rápidamente a los trabajadores de la universidad donde personajes impresentables como Dominguitos -quién esperaba mejor trato, es decir ser parte importante a cambio de su actuar, en el gabinete entrante-, promocionaron lo que ha sido costumbre en el pasado, y fue así como lograron triunfar, pero para no llevarse sorpresas contrataron a personas provenientes de la península ibérica, especializados en guerras sucias para armar la propaganda de la que todos fuimos testigos, que ensucio la contienda para darle un cómodo triunfo al partido oficial con la excepción de la capital del estado en donde la ciudadanía urbana no se dejó fácilmente manipular, y donde el triunfo de MORENA fue más que inobjetable.

 

Solo que no contaban con que nuestras maravillosas instituciones recibirían instrucciones de muy arriba -Osorio Chong, claro con el consentimiento del mismísimo Sr. Peña-, para anular las elecciones de la capital donde seguramente tendrían mucho que ocultar, y así el tribunal  local (¿o deberíamos decir PRIBUNAL.?) y su instancia superior en Monterrey decidieron anular el proceso -viendo la astilla en el ojo ajeno y no la viga en el propio-, lo cual para mayor descaro pasó sin discusión, vía Fast Track en el Tribunal Federal (PRIFE), donde ni siquiera se tomó en cuenta la posición del postulante -donde manda capitán… el marinero vale madres-.

 

Pero Dios Existe, la providencia divina comienza a actuar a través de las denuncias del Universal, y vaya usted a saber dónde termine todo, mientras que aquí, tengan la seguridad, se establecerá la tan prometida contraloría ciudadana que poco a poco sacará a la luz -y con pruebas fehacientes- todas las irregularidades realizadas en el gobierno que apenas termina.

 

AHORA SI, ¡CAIGA QUIEN CAIGA!

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