Skip to main content

Dr. José de Jesús Reyes Ruiz

¿ESTAMOS REQUETEBIEN?

Para documentar mi pesimismo… y el de los demás

AMLO hiso este comentario en alguna de las conferencias mañaneras que día a día se convierten en más controvertidas y controversiales – que no es lo mismo – y lo hizo con respecto a la economía, pero si lo extendemos a todos los ámbitos del quehacer nacional diríamos sin afán de contradecirlo que:

Estamos requeté mal y todo apunta a que en el futuro en el corto plazo esteremos requeté peor, la economía por solo hablar de este tema está sufriendo severamente sobre todo ahora que nuestro vecino del norte nos envía nuevamente una amenaza vía twit de un aumento en los aranceles de un 5% si México no hace lo que se supone nos corresponde que es detener el flujo migratorio en la frontera sur, cosa que nuestro país está intentando pero es prácticamente imposible ante la avalancha de migrantes no solo centroamericanos sino también de cubanos y africanos que intentan llegar a los Estados Unidos.

Esto - ellos saben bien - es prácticamente imposible como lo es el frenar el tráfico de drogas a los Estados Unidos mientras no disminuyan el consumo, también estaría en sus manos frenar el tráfico de migrantes si armaran un andamiaje legal adverso a la aceptación – así sea como una posibilidad – de los migrantes en una forma tan simple como lo hemos señalado en ocasiones anteriores, porque los migrantes entran a territorio norteamericano solo para ser controlados por la patrulla fronteriza y esperar a ser recibidos para solicitar formalmente la amnistía después de lo cual son regresados a territorio mexicano para que nosotros nos hagamos cargo durante su estancia solo para que finalmente les nieguen la entrada.

No sería más fácil – insistimos – en que dentro de la ley aprobaran un apartado señalando que cualquiera que ingrese ilegalmente a territorio norteamericano está rompiendo la ley y como delincuente no puede acceder a ningún tipo de amnistía migratoria.

Es duro pero con ello se bloquearía el flujo de migrantes que tendrían que buscar el pacto o la protección de las autoridades norteamericana desde los consulados y embajadas en sus países y el problema se resolvería totalmente desalentando los flujos que vemos actualmente de más de medio millón de seres humanos que cruzan nuestro país buscando el sueño americano.

La realidad – y lo hemos comentado – es que ciertos intereses de tipo electoral han promovido la migración que no se había visto antes para que el presidente güerito se dé el lujo de dar golpes sobre la mesa amenazando a nuestro país con todo lo que ustedes puedan imaginarse, y ahora es la aplicación de un 5% a los productos provenientes de México, lo que hundiría aún más nuestra economía que apenas intenta salir adelante con las dificultades y el enorme endeudamiento que nos quedó como herencia de los gobiernos neoliberales que le precedieron a López Obrador.

Nuestro presidente paso del ya clásico “amor y paz” a un mensaje ligeramente más duro en una carta de dos cuartillas que difícilmente leerá el magnate neoyorquino que solo puede revisar los twits que utiliza como medio de comunicación y de información, y para cuando estas líneas salgan a la luz ya sabremos sobre el resultado de las negociaciones que Marcelo Ebrard realizara en Washington el día 5 del presente mes de junio y que esperamos – aunque nos quedan muchas dudas – que puedan llegar a buen término, porque de lo contrario estaremos comenzando la próxima semana con un arancel que hundirá de pleno nuestra de por si debilitada economía.

Si el siempre anuncio, el simple twitaso hundió al peso que nuevamente supero la barrera de los 20 pesos cuando ya se había estabilizado en 18 y un poco más, y hundió nuestra bolsa de valores en más de un punto porcentual, que pasara – es la pregunta – si este arancel anunciado se hecha andar.

Y la segunda pregunta – tan importante como la primera – es en este escenario negativo que hará nuestro gobierno porque si la negociación falla – cosa altamente probable – tendría que responder con la misma medida de aplicar aranceles a la entrada de productos norteamericanos, no le quedaría de otra, tendría que instrumentar la ley del talión aunque todos nos quedemos chimuelos o tuertos.

Por qué denunciar ante la OMC – Organización mundial de comercio – que es otra alternativa y que sin duda se instrumentara, servirá para muy poco, si no han podido hacer nada en el conflicto comercial EU CHINA menos podrán hacer en este conflicto, de ello tenemos que estar seguros.

Este, el económico no es el único problema que debe preocupar a nuestro presidente, aunque en esta la relación con nuestro vecino del norte, y el problema de la migración prácticamente imposible de resolver sin la cooperación – que no se dará – del señor del copete ralo y güero el panorama es tétrico y no se ve por donde mejorarlo.

Y mientras tanto Hacienda se hace bolas intentando atender los recursos de los programas sociales prometidos y orquestados por el tabasqueño, y atender además las necesidades de los otros sectores como las del sector salud que se ha vuelto tan evidente sobre todo después de la renuncia del Director del IMSS.

Es evidente que este como cualquier tema por medio del cual se pueda cuestionar y atacar duramente a Andrés Manuel, será utilizado por aquellos que tienen el micrófono y que no están de acuerdo del retiro de las prebendas a que les acostumbro 35 años de gobiernos neoliberales.

Pero la realidad – y podemos probarla – es otra muy diferente, todos sabemos que la deficiente atención en los servicios de salud tanto el IMSS ISSSTE como la SSA son males crónicos y vienen de décadas atrás, lo mismo la deficiente administración de medicamentos, díganmelo a mí que fui director por 4 años del Hospital General de Zacatecas desde que abrió sus puertas, sobre las quejas que teníamos día a día por que no se surtían los medicamentos que para obtenerlos teníamos que comprarlos a costos de 100 a 200 % mayores de si se nos hubieran surtido por las vías legales, llegamos a tener hasta un 80% de desabasto y estamos hablando bajo los gobiernos de Miguel Alonso – en lo local – y Peña Nieto en lo nacional.

En cuando a la atención por la falta de médicos especialistas – que no es cosa de hoy – teníamos grandes rezagos pero nunca comparables a los que tenía el IMSS principalmente y el ISSTE también aunque en menor medida.

Desde la apertura del Hospital General nos encontramos con que muchos derechohabientes tanto del IMSS como del ISSSTE ocultaban su derecho habiencia y se inscribían al seguro popular para lograr citas menos retardadas y así el trabajo en nuestro hospital se duplicaba así como se duplicaban los costos.

Ante esta circunstancia buscamos que al menos el IMSS nos proporcionara un enlistado en donde pudiéramos detectar la doble derechohabiencia y negar el acceso o finalmente cobrar al IMSS por la atención proporcionada en nuestro hospital.

Y claro con el cambio del gobierno el problema posiblemente se incrementó en gran medida por la imposibilidad – y posiblemente también por la impericia – de hacienda para hacer llegar los recursos en forma ordenada y sin retraso. Están - no nos queda duda – pagando el precio de ser novatos al respecto, en esto como en todo hay una curva de aprendizaje que tiene que ser recorrida, y no me queda duda que las cosas mejoraran en el corto plazo.

Pero a ello súmenle un componente del que tampoco nos queda duda, y es el de las prioridades del presidente - que sin duda son sus programas sociales - limita los de por si menguados recursos de las arcas federales para otros asuntos que no pueden ser subestimados entre ellos ESCENCIALMENTE LA SALUD Y LA EDUCACION.

El presidente tiene que entender la importancia de no seguir limitando los recursos a los lugares donde son necesarios e indispensables como son los ya mencionados, y si es necesario limitar sus programas sociales para mejor ocasión o al menos sopesar los asuntos prioritarios y atenderlos en la medida de lo posible.

A ello tendríamos que agregar que dentro de su gabinete al menos en Salud no hay una actitud enérgica y propositiva para pelear por los recursos, el Secretario de Salud, magnifico reumatólogo deja mucho que desear en el aspecto político, él tendría que ser el que estuviera todos los días o en Palacio Nacional o en Hacienda demostrando la urgencia de los recursos y canalizarlos adecuadamente y responder – CON NUMEROS Y ARGUMENTOS SERIOS – durante las conferencias mañaneras no minimizando las cosas ni mucho menos como lo dice AMLO culpando al “hampa de los medios” de magnificar las carencias, y claro tendría que entender que lo hacen porque es lo que vende y por qué posiblemente sean influenciados por las cúpulas políticas y empresariales que añoran otros tiempos.

Peña Nieto se lanzó a construir hospitales aquí y allá porque era la mejor forma de hacerse de recursos fáciles – sin obra no hay sobra diría el dicho – y se calcula que el 50% de lo presupuestado para esas obras quedaban en los bolsillos de la mafia de atracomulco, esto es una realidad pero son obras iniciadas que tendrán que ser concluidas, y ya concluidas el problema será echarlas andar con todo lo que implica el recurso humano que no se tiene y que sería costosísimo y posiblemente imposible - porque no hay suficientes especialistas – conseguir.

Lo otro seria bajarle dos rayitas a las promesas imposibles de cumplir como son la de lograr un sistema de salud similar al de Canadá y los países nórdicos, nos deberíamos conformar con que todos tengan un respaldo médico y buscar los caminos posibles para lograr un Sistema Universal de Salud viable.

Otros puntos a comentar además de los asuntos de la salud, y después de haber hablado tangencialmente sobre la problemática económica, y dejaremos para las próximas colaboraciones los asuntos del NECESARIO ADELGAZAMIENTO DEL APARATO BUROCRATICO con los consecuentes despidos de cientos de miles de trabajadores, porque un sistema obeso como el que teníamos era prácticamente imposible de permitir el avance de un país que aspira un futuro mejor.

Seguiremos platicando sobre todo esto y mucho más…