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La Casa de los Perros:
Miguel Alonso al quite en Milpillas

CLAUDIA G. VALDÉS DÍAZ

La difícil situación económica que se padece no sólo en Zacatecas y México, sino en el mundo entero, obliga a los gobiernos locales a tomar medidas que, en otras circunstancias, ni siquiera estuvieran contempladas. Por ello, para enfrentar el cierre del ejercicio 2019, y todo lo que se refiere al 2020, el inquilino de La Casa de los Perros hoy anunciará que, ahora sí se apretará el cinturón.

Las cosas llegarán a tal grado que al gobernador Alejandro Tello Cristerna no le quedará de otra que informar a los más de nueve mil 700 burócratas, a los que apenas dijo que no despediría y que, al contrario, basificaría a quienes son susceptibles de este derecho, que este 2020 no habrá aumento salarial para nadie. Y nadie será nadie.

Esto, obviamente, no afectará tanto, por ejemplo, al secretario de Salud, Gilberto Breña Cantú, que se embolsa unos 114 mil 533 pesos, o al director del Instituto de Cultura de Zacatecas, Alfonso Vázquez Sosa, que mes con mes observa cómo llegan a su cuenta de nómina 85 mil 532 pesos. Como siempre, las pulgas se cargarán a quienes menos tienen.

De igual manera, se espera que Tello Cristerna reedite su plan anual de austeridad, el cual hasta el momento no fue cumplido a cabalidad, ya que, no se pueden pasar por alto, las múltiples contrataciones de asesores externos en las diferentes oficinas del gobierno diferente, lo que se aseguró, no sucedería jamás.

Habrá que esperar el anuncio completo que Tello Cristerna hará esta mañana para ver quiénes serán los pagaderos del nulo crecimiento económico que tiene el estado, y el país.

Miguel Alonso al quite

El que ya comienza a mover sus piezas con los de la 4T, para no quedarse fuera de la jugada, es nada menos que el exgobernador Miguel Alonso Reyes quien, tras intensas negociaciones con aquel que mueve los hilos del Movimiento de Regeneración Nacional en Zacatecas, logró que su primo hermano, Víctor Manuel Reyes Rodríguez, con un pírrico curriculum que incluye un diplomado en inglés, se hiciera de la dirección local de la Conagua.

Hasta hoy se ha sabido que Alonso Reyes ya habría llegado a muy buenos acuerdos para, de inicio, colocar a su pariente –hermano del exdelegado de la Conafor–, Gerardo Reyes Rodríguez, al frente de esta oficina federal que, antes que manejar los miles pozos que dejan muy buenos dividendos al que parte y comparte, tendrá en sus manos el multimillonario proyecto hídrico Milpillas.

Así, ahora de la mano del excompañero de trabajo del gobernador en la Compañía Cervecera de Zacatecas, Milpillas seguro avanzará y sorteará todas y cada una de las corruptelas que hasta hoy mantienen dicho programa sumido en la ignominia. Y si no lo creen, sólo aguarden un poco.

Pero, no se debe olvidar, este movimiento magistral de parte de Alonso Reyes no sólo dejó en el abandono a personajes como Cuauhtémoc Calderón Galván, quien hasta el último momento peleó con uñas y dientes este jugoso hueso, sino que aclaró a aquellos que no lo han entendido aún, que los puestos buenos no son para quienes “anduvieron en el movimiento” y, día y noche trabajan sin cesar para, supuestamente, seguir a David Monreal Ávila en su loca carrera por la gubernatura, sino para quien tiene mejores cartas con el que manda allá en Reforma 135.

En pleito

Cada día se ve más complicado que la Ley de Desaparición Forzada en Zacatecas llegue a buen puerto. El pleito que protagonizan las diputadas de Morena, Navidad Rayas y Alma Dávila Luévano tiene empantanadas todas las negociaciones. Ello, a pesar del esfuerzo de las diputadas Susana Rodríguez Márquez, del PVEM, y Perla Martínez Delgada, del PRI, quienes al final de cuentas son las que siempre asisten a las reuniones.

Resulta que, como presidenta de la Comisión de Justicia, Navidad Reyes demostró que no sabe ni lo que está haciendo en el Congreso, pues nunca se opuso a que el fiscal general de Justicia, Francisco Murillo Ruiseco, compareciera como parte de la Glosa, el mismo día y a la misma hora en que recibirían a Alan García Campos, jefe de la Unidad de Análisis de la Oficina de Alto Comisionado en Derechos Humanos ONU-DH.

Y peor aún, a pesar de ser la responsable de esta falta de coordinación, ella prefirió dejar su silla vacía en el foro: “Ley en Materia de Desaparición de Personas del Estado de Zacatecas: obstáculos y desafíos para su aprobación e implementación”, en el que además participaban los colectivos: Zacatecanas y zacatecanos por la paz, Familias Unidas en búsqueda de una esperanza; Amor, Esperanza y Lucha, Zacatecas, Movimiento por nuestros desaparecidos en México, para ir a calentar su curul y, de paso, agradecer “la participación y colaboración de la Fiscalía en trabajos de la Comisión de Justicia que preside”.

A ello se le debe agregar que, desde la Secretaría de Gobierno, tampoco hay mucho interés que digamos en el tema, sobre todo porque, quizás por ignorancia que de ellos depende directamente la Comisión Local de Búsqueda, el titular Javier Ramírez García jamás se ha siquiera parado en alguna de las reuniones. De hecho, nadie sabe ni quién es ni cómo carambas llegó al cargo. El precio de seguir pagando favores políticos.

Y como dijimos, lo entrampado del tema se debe también a que las diputadas de Morena, –Navidad y Alma–, presentaron cada una su propia iniciativa de ley que, dicho sea de paso, no son más que un refrito de la aprobada por el Congreso de Veracruz y, obvio, ninguna de las dos quiere ceder la gloria.

Pero, como ha sucedido a lo largo de este quinquenio diferente, los rencores no han podido ser superados y siempre están por encima del bien común. De ahí que, como Mara Muñoz se encuentra impulsando también esta Ley de Desaparición Forzada, como parte de los colectivos, la indicación desde el gobierno a los integrantes de la fracción oficial es que mejor ignoren el asunto. Total, ni es importante.

Viento en popa

Y así, mientras la mayoría de los funcionarios y políticos en Zacatecas se la pasan peleando en la miseria, es Ulises Mejía Haro, el alcalde de Zacatecas, quien sigue enfocado en dar resultados y, de paso, posicionarse como la mejor opción de parte de Morena para encabezar la candidatura a la gubernatura para este cercanísimo 2021.

Por lo pronto, aprovechó el hermanamiento que con el municipio de Nochistán se firmó, para placearse y demostrarles a los de ese lejano lugar que, con él como gobernante, las cosas sí funcionan.

Claro está que lejano de esta opción no está el propio presidente municipal de Nochistlán, el priista Armando Delgadillo, quien como no queriendo dejó ver que alguien le ha dicho cuál es el rumbo correcto para el 2021.

Pero, mientras son peras o manzanas, Ulises Mejía consiguió este hermanamiento para que ambos municipios fortalezcan sus lazos de cooperación para la difusión de las riquezas culturales y tradicionales que guardan en común. Además, impulsarán la promoción turística de ambos destinos que cuentan con más de 400 años de historia y tradición.

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