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INSABI VS SEGURO POPULAR
Dr. José de Jesús Reyes Ruiz
II PARTE

VERDADES A MEDIAS

Para documentar mi pesimismo… y el de los demás

Hace una semana, iniciamos estas reflexiones con respecto a la gran polémica que se ha dado en los medios sobre el inicio problemático del INSABI (Instituto para la Salud y el Bienestar) en sustitución del Seguro Popular.

Dimos los argumentos para contradecir a todos aquellos que quieren mostrar ante la sociedad un desastre en el terreno de la atención de la salud que puede costarle la vida a cientos de miles de mexicanos por la poca planeación del actual gobierno de la 4T al desaparecer el Seguro Popular cuando no se tenían aun los esquemas para echar a andar la nueva Institución de Salud destinada a todos aquellos – que no son pocos – que carecen de seguridad social – IMSS ISSSTE etc. – y que se calculan en un 88 % del total de la población de los mexicanos que actualmente ronda en 120 millones de seres humanos.

La realidad – insistimos – no es como la pintan, y para comenzar explicamos en nuestras reflexiones previas que el Seguro Popular era un fideicomiso que concentraba recursos para la atención médica de quienes carecieran de seguridad social, pero que NO CUBRIA EL TOTAL DE LAS ENFERMEDADES dejando fuera prácticamente todo lo que representaba un tercer nivel de atención.

Además los recursos tenían que provenir en un porcentaje - el más importante – de la federación, pero había un porcentaje menor que tenía que ser cubierto por el Estado, y los gobiernos estatales muchas veces fingían demencia al respecto hasta que se tuvo que instalar candados donde si los estados no aportaban su parte los recursos de la federación no eran administrados.

Comenzó a haber una corrupción flagrante que solo en el sexenio de Peña Nieto provoco un boquete financiero de entre 7 y 8 mil millones de pesos que nadie sabe dónde quedaron, y claro de eso no hablan los medios ni los detractores del presidente, pero se calcula que al través de toda su existencia el Seguro Popular no puede probar recursos por el orden de 88 mil millones de pesos, y esto es lo que hiso que esos dineros que fueron a terminar en los bolsillos de gobiernos corruptos tanto a nivel estatal y federal pudieran – según el pensamiento de López Obrador – haber sido encaminados a cubrir las necesidades de salud de la población.

Reconocimos en nuestro articulo previo que independiente de las circunstancias que dieron con el nacimiento del Seguro Popular, es decir la era del neoliberalismo flagrante que pretendía que el estado fuera marginal y ya no se hiciera cargo de asuntos como la salud y la educación, con el lema de que quien requiera un servicio que pague por él y dependiendo del pago seria la calidad del servicio.

Esto estaba estipulado con todas sus letras en el Tratado de Libre Comercio – sí, aquel pactado por Salinas de Gortari que se suponía que nos metería al primer mundo - y los sexenios neoliberales que le siguieron, con Zedillo, Fox, Calderón y Peña Nieto, creían totalmente en estas políticas y las siguieron al pie de la letra, y como en todo no puede decirse que todo, absolutamente todo resultado de una acción determinada tiene que ser necesariamente malo, ya hablamos de la brillante elaboración del plan para armar al Seguro Popular de Julio Frenk un distinguido médico que había sido Presidente de la Academia de Medicina y que actualmente dirige la Universidad de Miami quien con un equipo de personas preparadas en el tema diseño este programa y que ahora sale a decir en los medios que México se rezaga 40 años con el término de su programa y el inicio del INSABI, pero que solo toca el tema de la enorme corrupción que se dio en forma marginal.

Es verdad que AMLO pretende realizar un cambio radical en las formas de gobernar, la 4T significa esto por lo que en ningún momento ha pensado en cambios progresivos utilizando lo que se hiso bien en el pasado y modificándolo poco a poco, no le da un sexenio para esto y él quiere otra cosa para México.

Su forma de pensar es que si se le suman los 88 mil millones de pesos que se tiraron al saco de la corrupción durante el tiempo en que el Seguro Popular existió, a los miles de millones de pesos que si se utilizaron, le da una cantidad que él piensa puede garantizar la salud de todos los mexicanos que carecen de seguridad social porque en este sentido tenemos que reconocer que tiene razón, la constitución se compromete a dar una educación y un servicio de salud gratuito a toda la población, pero esa es una de las tantas utopías que están contenidas en la constitución del 17 – y en las anteriores – que en mi perspectiva de las cosas nos señala solamente una meta para que nosotros diseñemos el camino que nos lleve a ella.

Y ese es el camino que el gobierno federal y el tabasqueño tienen que diseñar, pero POR EL AMOR DE DIOS, HAY FORMAS DE HACERLO, porque mientras un personaje vacío de la cabeza como Vicente Fox, pudo armar un grupo de Head Hunters que le allego a personajes tan valiosos como Frenk un conocedor de la Salud Publica, que tenía ya 40 años de colaborar con la Organización Mundial de la Salud, López Obrador por su lado contrata a un personaje – actualmente invisible – un buen Nefrologo, pero no experto en las áreas de la Salud Publica en las que nunca trabajo, y que nadie ve que salga a hacerle frente a los cuestionamientos, y por si esto no fuera ya de por si poco, contrata a una persona experta en arqueología, en vestigios de otras civilizaciones, para estar al frente del INSABI con la certeza de que no tiene ni la más remota idea de la tarea tan importante que se le encomendó.

Es claro que la frase de que prefiero 90% de honestidad y solo 10% de conocimientos en el área que se les encomienda ES UN TOTAL Y ABSOLUTO ERROR, no me queda duda que abundan personajes 100% honestos y además expertos en el área de la salud solo que las ocurrencias son algo que por lo que podemos ver predomina a la hora de hacer las designaciones.

AMLO Prefiere gente que le diga si a todo a una persona que le cuestione y le diga realmente los caminos en áreas que él no tiene por qué conocer.

La idea en si no es mala, un gobierno que piensa en realizar todos los gastos médicos para la atención de un primer y un segundo nivel. El problema es si habrá recursos para ello, ¿y el tercer nivel apa? Por el momento pide que intente dar atención gratuita – si como no y de onde apa – y después en los datos a cuenta gotas que el ISABI está comenzando a soltar nos dicen que existen 60 acciones en el terreno del tercer nivel que se otorgaran en forma gratuita y que en el corto plazo puede haber 30 más, un poco lo que pasaba con el seguro popular, solo que tendría que haber la apertura para que la sociedad conociera cuales acciones pueden estar disponibles y cuáles no, vamos si ni siquiera los dirigentes del sector salud lo saben a nivel estatal y federal.

¿ENTONCES COMO?

Que se simplifica la atención a la salud eso resulta claro, antes tenías que hacer – anualmente – todos los trámites para ser parte del seguro popular, actualmente con que presentes tu credencial de elector están obligados a darte la atención que requieres, y que de ninguna forma requiere de cuotas de recuperación como se hacía antes de la existencia del seguro popular, pero esto son cosas que el propio sector salud desconoce, sabe que tiene que atender a la población, sabe que al hacerlo realizara gastos lo que no sabe es como se le van a retribuir por parte de la federación estos gastos, y si lo que recibe de la federación no alcanza con respecto a lo gastado – y claro a las corruptelas de siempre – entonces ¿Cómo?

Supongo que el INSABI tendría que haber enviado reglas claras de operación, lo que no ha hecho, tendría que haberlo realizado con la debida anticipación, armar programas piloto, y no como siempre improvisar a ver que sale, porque bien a bien a 20 días del inicio de las funciones del INSABI nadie SABI las reglas que implica su funcionamiento ni claramente los servicios que se otorgaran gratuitamente en el tercer nivel y los que no, y en este último de los casos lo que se cobrara a la persona que los reciba.

La meta es un programa de SALUD UNIVERSAL donde todos los mexicanos tengan derecho a recibir atención médica, que según AMLO será totalmente gratuita cuando termine su mandato en el 2024 lo que no nos dice, lo que nunca dice es de donde saldrán los recursos en un país pobre para poder sostener esta enorme meta cuando nos dice una y otra vez que no habrá una reforma fiscal donde se busquen más ingresos.

Entre sus chistes – no se les puede ver de otra forma – como el de la rifa del avión, nos sale en que buscara unos servicios de salud como los de Canada o los países Nórdicos, yo no conozco estos últimos pero conozco los de Canadá donde me forme profesionalmente en parte, y donde mi hija recientemente realizo un post doctorado donde ENTENDIMOS QUE LOS SERVICIOS DE SALUD TIENEN TODO MENOS CALIDAD, la tención tarda aun y cuando tengas un problema de urgencia y ante la deficiente atención medica - donde el tercer nivel si es de excelencia - tienes la enorme desventaja que no puedes atenderte en forma privada por que la medicina privada es inexistente, no estoy seguro que este es el camino que debamos seguir.