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Nota Espe_culera
By Syres
LA PUERTA GRANDE

Desde el sexenio Amalista, surgió la política del Retiro Voluntario, que originalmente permitió dar una salida digna y anticipada a más de cien servidores públicos que fueron contratados durante el periodo gubernativo de Ricardo Monreal y que eran adultos mayores, por lo que este beneficio les permitió alcanzar la jubilación por edad desde la comodidad de su hogar permitiendo la contratación de gente nueva. Gracias a esta política, muchos se acogieron a este beneficio que les permitía disfrutar de una liquidación económica mientras a la par la patronal seguía cubriendo sus pagos ante el Instituto Mexicano del Seguro Social hasta que alcanzaran la cesantía.
Para el gobierno Alonsista, el tema del Retiro Voluntario resurgió con gran auge, y fue aprovechado mayoritariamente por los perseguidos de MAR, quienes apenas surgio el cambio de estafeta PRD-PRI prefirieron acogerse a este beneficio ante una administración hostil que lo primero que hizo fue etiquetar a quienes no apoyaron la campaña -y curiosamente a quienes la apoyaron también- surgiendo las famosas listas de “apestados” que se decía, guardaba los nombres del personal que sería despedido o congelado.
Este quinquenio no ha sido la excepción, durante los años 2016, 2017, 2018 y 2019, Alejandro Tello publicó los acuerdos gubernativos de cada Ejercicio Fiscal reservando una bolsa que superaba los 15 millones de pesos para cubrir estas “liquidaciones”, bajo pretexto de que la intención de esta política era para despresurizar la nómina que habían heredado de administraciones anteriores, adelgazándola y congelando las plazas de aquellos que desearan salir de la administración pública.
Para el 2019, se decía que ya se habían acogido al Plan de Retiro Voluntario 700 servidores, bajo amenaza, de que aun aguardan en lista de espera otros 50. No dudo de los beneficios inmediatos de los servidores públicos retirados anticipadamente, pues de pronto ven sus bolsillos capitalizarse, sin embargo, la carga del pago a la burocracia en Zacatecas sigue reflejando un altísimo porcentaje de los egresos del Estado, ante gobiernos que han sido incapaces en incentivar la instalación de empresas en la Entidad. Pues, aunque las cifras han variado por administración, la realidad es que el Gobierno del Estado representa después de la BUAZ, la única fuente de empleo para muchos zacatecanos.
Lo que debemos fiscalizar los ciudadanos es a quienes se les ha beneficiado, no por algún interés morboso, sería un buen ejercicio de transparencia verificar si dentro del listado de “servidores” que esta administración se han acogido al “Retiro Voluntario” no se encuentran los familiares y amigos cercanos de los Funcionarios de primer nivel, por ejemplo sería interesante saber cuánto le dieron al inhabilitado Director de Imagen Institucional, quien legalmente, no tenia por que recibir un solo centavo, al contrario, debió de haber reintegrado los recursos faltantes, o por qué no, cuanto se llevaron a la bolsa el cuñado y sobrino del Secretario de Finanzas quienes también se acogieron a este beneficio y son de los muchos casos que han sabido salir del Gobierno “por la puerta grande”. Porque como siempre lo digo, “especulo” que el Colapso del Plan de Retiro Voluntario obedece a que los recursos se repartieron de acuerdo a los intereses políticos de Alejandro Tello y no, a los servidores públicos que por antigüedad eran merecedores de este beneficio.