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Por José de Jesús Reyes Ruíz

Para documentar mi pesimismo… y el de los demás

Tal vez habíamos olvidado que somos un organismo frágil en extremo, que nuestra  existencia tiene múltiples flancos vulnerables que hacen nuestra vida – ahora nos damos cuenta – sea tan lábil que un microrganismo de 200 nanómetros de peso, invisible y aparentemente inofensivo nos ha puesto,  - a la humanidad entera - en jaque y en estado de pánico, haciéndonos  pasar por momentos que difícilmente hubiéramos imaginado”

 

En la última colaboración, hablamos de las repercusiones sobre la salud de la humanidad entera y los estragos provocados por la pandemia del nuevo virus de la doble corona. Hoy nos toca reflexionar sobre un tema que aunque muchos mencionan todos los días en los medios, como uno de los que resultara mayormente afectado por la pandemia, pocos dicen que esta “peste” que afecta a nuestro mundo y nuestra existencia, tal parece diseñada más que para atentar en contra de la salud de la humanidad, realmente parece encaminarse a romper un ciclo, el ciclo económico, el capitalismo tal y como lo conocemos y que tiene ya 3 siglos con nosotros,  que nos aseguró haber triunfado en 1988 con la caída del muro de Berlín y con el fin del socialismo como alternativa económica, iniciándose una nueva época la del neoliberalismo,  y arrogantemente anunciándose como el “Fin de la Historia”  “Huntington, Harvard 1988”

Resulta que el fin de la historia no se dio entonces, pero si se da ahora, al menos el fin de la historia de una economía que se inicia con el descubrimiento del nuevo continente durante el siglo XVI,  posiblemente como resultado del Renacimiento cuando el ser humano salió del “oscurantismo” de la Edad Media – nótese que lo pongo entre comillas por que para muchos no fue una época necesariamente intrascendente.

Tenemos que recordar la historia  porque de otra forma no podremos entender lo que actualmente nos ocurre. Cuando el Hombre entendió y conoció la globalidad de su mundo, y se reforzaron con ello los viajes en búsqueda de riquezas fáciles de conseguir, y después  se intensificaron los comerciales,  - aunque algunos solo buscaban entender mejor el mundo como el caso  de Humboldt – porque el comercio - que no se nos olvide - ha acompañado al ser humano durante toda su existencia. Vinieron después las ideas positivistas y la Revolución Francesa, y después la Revolución Industrial y el Capitalismo Euro centrista liderado después por los Estados Unidos,  la Gran Guerra y los intereses de dominar hegemónicamente territorios y más territorios – interés que también ha acompañado desde siempre a la humanidad –  la Guerra Mundial y después de ella la Guerra Fría que terminara como lo mencionamos con la caída del Muro de Berlín y el triunfo – aparente - del capitalismo.

Dios había muerto como lo aseguro Nietzsche  en el siglo XIX, y aunque la gran mayoría de habitantes del mundo lo retenía dentro del subconsciente, las elites tenían que ubicar a otro dios que lo substituyera, por que como se dice por ahí los vacíos tienden a llenarse, las lagunas abandonadas se ocupan y así como renacieron los ídolos cuando Moisés subió a la montaña en la búsqueda de una nueva ley universal, el Dios expulsado por ilustres nonagenarios, fue poco a poco substituido por un ídolo que aún subsiste hasta nuestros tiempos. EL DIOS del  DINERO,  IDOLO DE ORO que no termina por dejarnos, pero al final de cuentas,  se trataba de un dios solamente, habría que crear alrededor de este dios una religión y así nace el MERCADO y después de la caída de un socialismo que propugnaba – al menos en idea – un ideal comunitario, pensadores del siglo pasado como FRIEDMAN crearon al nuevo ser humano que substituiría al superhombre nietcheano y claro al homo sapiens,  naciendo el INDIVIDUALISMO COMPETITIVO. “Yo tengo que ser mejor que tu primero en el asunto de los dineros y después en los asuntos del poder”

El poder de las comunicaciones creado por el hombre produce como resultado la ALDEA GLOBAL y la caída de los muros que siempre separaron a las naciones, los muros siguieron existiendo para las personas, pero no para las mercancías y para los dineros,  así nacieron o crecieron las grandes empresas transnacionales, los emporios económicos y las grandes iglesias de la nueva religión, olvídense de San  Pedro y del Vaticano, olvídense de sus jerarquías, estos espacios fueron ocupados por los organismos rectores de la nueva religión el BANCO MUNDIAL y el FORO MONETARIO INTERNACIONAL y la nueva religión que nace en este escenario fue la del NEOLIBERALISMO.

Si es de economía de lo que intentamos hablar – con una disculpa a los verdaderos economistas de parte de un personaje ignorante en estos temas de altura que sin embargo intento entender y abordar con el único objetivo de entender un poco mejor la realidad de lo que nos rodea – No podemos olvidarnos de LA REFORMA  momento de inicio de dos mundos que se fueron alejando poco a poco, un mundo del norte, protestante, donde la usura fue finalmente permitida, donde la ideología religiosa se volvió cultura, usos y costumbres de un ser humano responsable, trabajador, ahorrador – y claro un poco o un mucho usurero – en donde la economía floreció porque este el hombre del norte resulto presa fácil de lo que después se conoció como individualismo competitivo, donde el fin justificaba los medios y donde no importaban mucho la ética de dichos medios si es que se podía ascender hacia las elites económicas pero también políticas y de poder.

Esto frente al sur, un sur que se quedó con los elementos centrales del catolicismo y con ellos de una nostalgia por el bien de la comunidad frente al bien individual, un ser humano creativo que sin embargo nunca le preocupo vivir al día, que nunca se preocupó por ahorrar, un ser más interesado en vivir que en acumular y que dio como resultado un mundo pobre confrontado no pocas veces con un norte rico del que tarde que temprano iba a depender y en cuyas garras tarde que temprano tenía que caer.

Aunque esta es otra historia, tiene que ver como el tema que ahora nos ocupa, porque la llamada aldea global vista por muchos como una bendición de la modernidad resulto en gran medida contraproducente, ahora entendemos que esta la nueva religión NEOLIBERAL, con su DIOS EL DINERO y su IGLESIA EL LIBRE MERCADO solo produjo más pobreza e inequidad en este mundo, la enorme riqueza que produjo se quedó en pocas manos siempre ansiosas de subir hasta llegar al paraíso conocido como SOLO PARA PRESONAJES FORBES, fuera de ahí todo carecía de sentido. Para nadie es un secreto que esa enorme riqueza que se produjo en ese el nuevo mundo jamás goteo hacia las clases más marginadas que se volvieron día a día más pobres más dominadas y más esclavizadas que en algún otro momento de la existencia del ser humano.

Esto no podía seguir, SI HAY UN DIOS VERDADERO este tendría que poner un hasta aquí como lo hiso con el diluvio,  ESTO TENIA QUE PARAR, y la actual pandemia de coronavirus, si lo analizamos bien, no es en mucho contra la demografía, actualmente existen 50 mil muertos y la cifra difícilmente llegara al millón, que si comparamos con los 50 a 100 millones de la Influenza  mal llamada española, sentimos que se trata, perdonando la expresión de un rasguño para una población de 7 mil quinientos millones de habitantes. Esto nos debe quedar claro.  LO QUE TAMBIEN NOS QUEDA CLARO ES QUE EL GOLPE PRINCIPAL DEL PROBLEMA ACTUAL ES SOBRE LA ECONOMIA TAL Y COMO LA ENTENDEMOS Y COMO LA VIVIMOS Y CONOCEMOS, esto tendrá que cambiar cuando los tiempos del virus de la doble corona se hayan ido – si es que se van -  el mundo tendrá que repensar el sistema económico mundial sobre todo aquel de enormes privilegios a quienes tienen entre que más tienen,  y la desprotección que han propiciado sobre aquellos que de todo carecen.

Tendrán que repensar el modelo del libre mercado, tendrán – tendremos - que replantearnos el valor del dinero por sobre el valor de la vida humana, tendrán y tendremos que mirar a los de abajo, a los que menos tienen a los marginados, tendrá que repensarse la pertinencia de seguir con la usura que se realiza desde el BANCO MUNDIAL y el FONDO MONETARIO INTERNACIONAL hasta todos los bancos grandes y chicos que sobre todo en países como el nuestro se les ha dejado ser, instalar comisiones elevadísimas ante la mirada impotente de sus usuarios a los que no les queda de otra nada más que aguantar vara. Tendrá que entenderse que las fronteras no solo podrán ser atravesadas por las mercancías sino también por los seres humanos que no ven en sus lugares de orígenes la mínima posibilidad de subsistir.

Ahora bien,  para algunos – un servidor incluido – esta es una posibilidad sobre un cataclismo que ahora sí que le cae a la humanidad como anillo al dedo – AMLO dixit – para que el ser humano se percate – si es que esto es posible – de lo que ha hecho mal, y claro quienes tienen que darse cuenta del mal realizado son las elites por que los de abajo lo saben aunque no pueden hacer nada al respecto.

Pero también hay quien piensa que esta “maldición” proviene no de arriba  sino de bajo, de la tierra misma, es decir de la PACHAMAMA, la madre naturaleza quien es de alguna forma la victima del desarrollo, del “progreso” y de la modernidad, el ser humano se ha dedicado a acabar en la medida posible con la naturaleza, ignorándola, violentándola, humillándola porque se siente su dueño - en realidad no lo es - cerrando los ojos cuando se habla del sobrecalentamiento y la urgencia de realizar acciones para defender la ecología.

 

Pero de la pachamama, y de la economía de México como un asunto particular, seguiremos escribiendo en nuestras próximas reflexiones.

 

El análisis de la pandemia continuara…