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Mayela Pulido
El milagro que NO llegó
Este es el testimonio de la hermana de un donante de órganos...
En un segundo la vida te cambia...
Te hablan y te dicen que tu hermano salió del trabajo, se tomó la cabeza con las manos, gritó y se desplomó.
Llegas a la clínica y te dicen que tiene muerte encefálica y un aneurisma te muestran tomografías, te hablan y hablan... y es irreversible y hay que esperar un milagro...
Te aferras al milagro y pasas la noche rezando, implorando, suplicando que el milagro se produzca, por tiene 40 años, es deportista, sano y tiene tantas cosas por hacer, tanto por vivir... tener el hijo que tanto deseaba y vivir su pasión por ser actor!
Ser el mejor hijo, el mejor hermano, el mejor amigo, un buen tipo.
Estás frente a Dios suplicando, prometiendo, hablándole y llorándole...
pasan las horas, los segundos eternos, el milagro NO llega y sigues rogando.
Estás frente a los médicos y te confirman que tu hermano menor ha muerto!
El mundo se cae y el alma se hace pedazos y el milagro NO llegó...
Y alguien se acerca y pregunta sobre la donación de órganos, y sigues pensando que el milagro NO llegó, y te enojas y te preguntas porqué la donación?
No dejo expresada su voluntad de donar sus órganos.
Nos encontramos con nuestros papás teniendo que decidir de algo que no habíamos hablado nunca...
Donar sus órganos, debimos reflexionar, hubo preguntas, hubo dudas y respuestas y se derribaron los mitos.
Fue difícil aceptar que el milagro No Llegó y tomar la decisión...
Que diría mi hermano de la donación?
Que hubiera querido?
Que haría en nuestro lugar?
El dejo la respuesta con sus actos... Si regalaba sus juguetes cuando era niño, siempre dio la mano al que lo necesitaba, si siempre regalaba una sonrisa y una palabra amable con todos, era solidario, noble...
Ya no hubo dudas, así fue su vida, la mano abierta y su corazón noble en ella dando siempre a otros...
El milagro NO llegó pero mi hermano, cuando ya no tenia más para dar, dio la VIDA a partir de nuestra decisión de su familia... él donó sus órganos para cinco personas que tuvieran vida.
El milagro NO llegó... pero hay cinco personas que viven por que ante lo irremediable SE DIJO SI.
Por eso y mucho más, piénsalo y deja vida, deja amor, deja un milagro que SI llegó para otra nueva vida...

El amor es mirar al OTRO, NO PARA SERVIRSE DE ÉL, SINO PARA servirlo...
Juan Pablo II

mayeipul2020@gmail.com