La Manzana Flechada
Cultura dentro de casa
Martha Chapa
Si bien el bombardeo en los medios de comunicación se centra fundamentalmente en prevenciones, recomendaciones o consejos para contener el devastador COVID19, que debemos atender y aplicar a la vida cotidiana para evitar mayores y más graves males, es válido y aconsejable que también incorporemos en el enclaustramiento hogareño, para hacerlo más disfrutable, contenidos culturales que por igual nos enriquezcan.
Así, las opciones han empezado, aunque un tanto tardíamente, al parecer de lo que ya se advierte una amplia y atractiva oferta cultural para que desde casa nos sintonicemos y lo mismo podamos escuchar un concierto, admirar un ballet, conocer o reconocer un museo o bien adentrarnos en la literatura en sus más diversos géneros, ya sea una novela, un cuento, poemas, crónicas, ensayos, etc.
La oferta creciente da para todo y todos, pues lo mismo nos podemos entretener viendo una película de las antigüitas, ya sea nacional o de las clásicas de Hollywood; como sentarnos fraternalmente unidos frente al televisor y admirar la música y estética magistrales del Bolshói de Rusia; caminar virtualmente por el Museo de Louvre de París o el Museo Del Prado de España e igualmente otros muchos más; o en nuestro estéreo poner a grandes músicos y comentarlos con nuestra pareja, hermanos y familia en conjunto, como pueden ser entre otros, Beethoven, Mozart, Verdi, Puccini, Schubert, Liszt, o hasta ponernos a escuchar y bailar los valses de Strauss, en fin, se trataría entonces de la oportunidad del privilegio de confeccionar nosotros mismos todo un programa cultural que mezcle música, libros, cine o series televisivas para deleitarnos y enriquecernos educativa, cultural y espiritualmente hasta el 30 de abril, fecha en que se anuncia regresaremos, aunque gradualmente, a nuestras actividades laborales y sociales.
Es también una oportunidad para dialogar y para retomar esa comunicación intrafamiliar que parece haber menguado en los tiempos modernos, de tal manera que nos haga mejores seres humanos, más unidos, solidarios y amorosos, lo cual hace que me detenga aquí a que leamos por ejemplo a Jaime Sabines, Octavio Paz, López Velarde, Amado Nervo, Gutiérrez Nájera y a otros grandes poetas del México de ayer y hoy.
Una tarea amena y productiva que significaría usar nuestro tiempo libre de manera creativa e inteligente, en lo personal y en la de los demás, por lo que lo que queda en notros, toda esa belleza, debe ser compartida con nuestros seres queridos y cercanos, como también cuando salgamos de nuevo a la calle, lo mismo con nuestro círculo amistoso, vecinos, compañeros de trabajo y en toda tertulia a la que asistamos.