Skip to main content

Viviendo por siempre
Mayela Pulido
A pesar que ya son 28 años que recibí la noticia que mis pequeños hijos tenían una enfermedad incurable, progresiva y degenerativa aún sigo de pie tratando día a día de seguir adelante, hay momentos que me caigo, y no tengo de otra más que levantarme y continuar, no voy a remediar nada estando en el suelo. Creo que se vale, soy un ser humano que siente, le duele y se vale decir hoy no puedo más.
Pero Dios me dio la oportunidad de crecer como persona y es muy fácil caer en la auto compasión para tener el pretexto de no querer continuar.
Pero no está en mis manos cambiar mi vida, la vida que está en mi entorno.
Y que es lo que me toca a mi?
Levantarme, sacudirme voltear al cielo buscar a Dios y sentir que en esos momentos difíciles que me siento sola y sin fuerza para continuar, es el quien menos está protegiendo, abrazando y diciendo, tu puedes y estoy junto a ti.
Sé que he sido tan bendecida por tantas cosas, pero lo más importante es que mis hijos viven una vida casi como todos nosotros, con la bendición de un trasplante, con una segunda oportunidad de vida y con mucha calidad!
Día a día hay que hablar de quien está en esta situación tan difícil, no solo para el paciente, también la familia completa sufre!
Para muchas personas que viven o mejor dicho, sobreviven con enfermedades crónicas degenerativas los trasplantes su última y única alternativa de vivir, y sé vivir con calidad!
Más de 23,000 personas están en una situación difícil de estar esperando una esperanza y luz en su alma!
En ocasiones me siento que navego contracorriente y que estoy en medio de un inmenso mar en un velero sin protección, pero estoy convencida del gran corazón de los seres humanos y digo:
Con una persona que quede convencida al día me doy por satisfecha, se que es muy poco, pero la roca se parte por la gota constante que la golpea!
Quiero un México muy dónate, un Zacatecas que sea el más donador, sensible, un estado lleno de amor por su prójimo, más humano, con empatía al dolor de los que lo necesitan, tal vez mi sueño nunca lo vea realizado pero, habré dejado un camino corto, muy corto... pero ya una semilla sembrada que aunque yo ya no esté aquí, será un fruto para muchos...
Para todos...
Amo mi estado, amo a mi país amo a Dios y dedicaré mi vida y mi tiempo en concretizar, enseñar y ayudar a los demás...
Hablemos siempre de donación, de trasplante, de amor al prójimo!
Por la vida...
Hablemos siempre de donación
de órganos...