¿Por qué no explicar que el ayuno fortalece el sistema inmunitario en solo 3 días?
¿Por qué no hablar sobre los beneficios de la ducha fría?
¿Por qué no hablar sobre las bondades del agua de mar?
¿Por qué no hablar de la importancia de tomar el Sol y de la actividad física donde numerosos estudios han comprobado su rápida efectividad para fortalecer el sistema inmunológico?
¿Por qué no compartir lo básico que es respirar de forma profunda y consciente, para que el cuerpo esté bien oxigenado?
¿Por qué no explicar qué plantas, en sus formas concentradas, aumentan las defensas inmunes en unas pocas semanas?
¿Por qué no hablar de la vitamina C en altas dosis, de la Vitamina D3 y minerales como el zinc, selenio, magnesio?
¿Por qué no explicar que el miedo es inmunosupresor y contrae nuestra respiración natural? Y como promotor de la enfermedad, es la única emoción transmitida 24 horas al día por los principales medios de comunicación…un nivel de ansiedad que lo debilita a diario.
¿Por qué no facilitar el contacto humano, que libera oxitocina, la llamada hormona de la felicidad, y que contrarresta en nuestro organismo el efecto de las hormonas del miedo, como el cortisol, y nos lleva a un estado de mayor equilibrio y bienestar?
¿Por qué no promover una buena alimentación y hábitos saludables?
