Violencia Silenciosa
La violencia hacia los hombres se manifiesta a través del maltrato verbal, emocional o psicológico. Es la forma principal de abuso a la que los hombres a menudo se enfrentan.
Aunque no involucra contacto físico, sus secuelas pueden ser incluso más duraderas que las de la violencia física.
Esta violencia suele ser más común en relaciones de pareja, representando un 80% de los casos en noviazgos, un 40% en matrimonios, y alrededor del 40% en situaciones de divorcio.
En estos últimos casos, las mujeres a veces utilizan el chantaje o la prohibición de ver a los hijos menores para ejercer violencia emocional sobre los padres.
La violencia contra los hombres está relacionada con el desarrollo de la economía productiva y las transformaciones en las estructuras sociales. Algunos terapeutas sugieren que sus raíces se encuentran en causas históricas y sociales.
En México, la violencia contra los hombres ha ido en aumento, afectando a 4 de cada 10 hombres, y en la mayoría de los casos, es perpetrada por mujeres.
Sin embargo, el 96% de los hombres no denuncia esta violencia.
El maltrato a hombres se clasifica como violencia doméstica, y según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), alrededor del 25% de las denuncias corresponden a hombres maltratados por sus parejas.
En Zacatecas, las denuncias de violencia por parte de hombres contra sus parejas van en aumento, superando los registros de años anteriores.
La falta de denuncias por parte de los hombres se debe, en gran medida, a la vergüenza, la dificultad para ser creídos por las autoridades y el hecho de que, en algunos casos, las autoridades rechazan sus denuncias.
La policía suele ser escéptica hacia los hombres maltratados y tiende a minimizar la situación debido a su género.
Además, el chantaje y la manipulación son otros factores que evitan que los hombres denuncien esta forma de violencia.
Beatriz Rosas Murillo
Abogada y Maestra de Telesecundaria
