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Dr. Pablo Quezada

La sanación con sonido es una práctica antigua que utiliza vibraciones sonoras para restaurar el equilibrio físico, emocional, mental y espiritual en una persona.

Se basa en la premisa de que todo en el universo tiene una vibración propia, y cuando estas vibraciones están desequilibradas, pueden causar enfermedades o malestar.

Una de las formas más comunes de sanar con sonido es a través de la terapia de sonido, que implica el uso de instrumentos como cuencos tibetanos, diapasones, tambores chamánicos, campanas, entre otros, para generar frecuencias que pueden armonizar las energías del cuerpo.

Estos sonidos pueden resonar a frecuencias específicas que afectan positivamente a nivel celular, promoviendo la relajación, reduciendo el estrés y facilitando la curación.

Además, la música también se utiliza como herramienta de sanación sonora. Se cree que ciertos tipos de música, especialmente aquellas con tonos específicos, frecuencias o patrones rítmicos, pueden influir en las ondas cerebrales, estimulando estados de calma, concentración o incluso facilitando la liberación de emociones reprimidas.

La sanación con sonido se practica de diversas maneras en diferentes culturas. Por ejemplo, el canto de mantras en la tradición hindú o budista se considera una poderosa forma de sanación que puede purificar y equilibrar la mente y el cuerpo.

En la cultura aborigen australiana, el didgeridoo se utiliza para sanar a través de sus tonos profundos y resonantes.

Aunque hay testimonios anecdóticos sobre los beneficios de la sanación con sonido, la ciencia está comenzando a respaldar estas prácticas.

La terapia de sonido se está investigando en campos como la neurociencia y la psicología, demostrando su capacidad para reducir el estrés, mejorar la calidad del sueño y promover el bienestar general.

Sin embargo, es importante recordar que la sanación con sonido no sustituye la atención médica convencional, sino que puede complementarla.

Antes de buscar este tipo de tratamiento, es crucial consultar a un profesional de la salud para obtener orientación adecuada, especialmente si se tienen condiciones médicas preexistentes.