El esfuerzo nos llevará a la meta
Dra. Verónica Arredondo
Tenemos algunas formas de acercarnos al futuro, de prepararnos ante lo que desconocemos, creo que una de ellas es estudiar para una profesión que desempeñaremos en el momento debido. Yo sé que estudiar no es nada sencillo. Necesitamos de las condiciones adecuadas, oportunidades, recursos; necesitamos paciencia, argumentos, idealmente de profesores que nos guíen y amparen; necesitamos instalaciones educativas de calidad y sistemas que funcionen de acuerdo con las circunstancias; y creo que lo que más necesitamos es empuje, osadía y esfuerzo.
En estas fechas, los estudiantes terminan sus años escolares y esperan arribar al siguiente. Muchos de ellos, preparan exámenes finales que los acreditarán para aprobar asignaturas y materias. Estudiar una materia, un campo del conocimiento, a través de un periodo, año o semestre, es desgastante y complicado. Un estudiante requiere capacidad de comprensión y entusiasmo, interés, salud y otras herramientas que aparentemente no se notan, pero que son igual de importantes. El fin de cursos representa la última barrera para quien aspira a continuar su carrera académica.
Para los estudiantes interesados en continuar con su trayectoria académica, no hay vías rápidas ni soluciones fast track que los auxilien, no. La solución académica comprende de reglas y años de estudio, no hay forma de encontrar un atajo. Se necesita dedicación y fuerzas, atención, sapiencia, para llegar a buen puerto cuando ha concluido un año más en la escuela. Además, no se trata de aprobar por aprobar sino que resulta indispensable entender lo que se les ha enseñado porque ese fragmento de conocimiento será necesario para continuar con lo siguiente.
Decía mi sobrina que: “Las lagrimas y desveladas merecen la pena cuando obtienes una calificación aprobatoria y sabes que es una asignatura dificil, una buena profesora pero no fàcil y la mitad del grupo no aprueba regularmente, sabes que hiciste un esfuerzo que mereció la pena”. Yo lo entiendo y lo comparto, entiendo que el esfuerzo nos lleva a alcanzar lugares para los que se trabaja todo un año escolar, un lugar que se ve representado en el acceso al siguiente año. Por eso esta época de exámenes y entrega de trabajos finales es tan necesaria para las escuelas, los maestros, los alumnos, porque a través de estas plataformas, se puede reconocer el desempeño académico del alumnado.
Quizá haya otras maneras de evaluar el conocimiento, se tienen que usar diferentes herramientas y ejercicios para alcanzar a dimensionar lo que el alumno(a) ha aprendido a través del curso, pero un examen, como todos sabemos, es una forma de revelar y reforzar los conocimientos que se han adquirido. Como tema, un examen representa una puerta que se tiene que cruzar para llegar a la siguiente etapa de la carrera. Estudiar una profesión es eso: una carrera de largo aliento.
Creo que al final cada quien tiene una meta, a veces se puede saber cómo llegar, a veces se tiene que descubrir el camino, pero sea como sea, se requiere esfuerzo y paciencia. Hay etapas de descanso, eso es el fin de curso, un break después de haber recorrido los kilómetros de conocimientos que se tenían que recorrer. Creo que el fin de cursos también representa esa promesa, la promesa de las vacaciones, del alejamiento de aulas, libros, clases; una promesa que es muy necesaria para poder continuar con la academia.
El esfuerzo también tiene otras recompensas, y no nada más un certificado, un título, un diploma. El esfuerzo académico además de que nos dotará de conocimientos, nos ayudará a comprender el funcionamiento de la realidad y cómo encajar dentro de ella, o cómo crear estrategias que nos funcionen. Yo creo que es necesario que nos acerquemos a la realidad a través de distintas aristas y el conocimiento académico, científico, es una ventana que nos puede ofrecer la respuesta a enigmas y problemas que tenemos todo el tiempo enfrente.
Nuestro esfuerzo, nuestros interés, tesón, paciencia, también puede ayudar a inspirar a otras personas. Actualmente muchas mujeres tenemos la oportunidad de tener una profesión, podemos convertirnos en científicas y matemáticas. Creo que ese ejemplo puede servir para impulsar a las siguientes generaciones. Puede servir para que las niñas de todo el país y en particular las niñas de Zacatecas se percaten de que sí se puede. Que se puede estudiar, tener una profesión, que se puede salir de las convenciones y romper con los paradigmas.
El esfuerzo nos puede llevar a alguna meta, a algún lugar, eso no se puede negar. Quizá sea solo un lugar más, uno que no conocemos, pero el esfuerzo nos impulsará para recorrerlo. Me consta, así me convertí en matemática y científica.
Actualmente formo parte de un proyecto que busca impulsar a las niñas en la ciencia, dentro del proyecto se promueven perfiles de mujeres matemáticas; a través de un video se muestran lo que hacemos y lo que les queremos decir a las niña, el video ha sido recibido con alegría en las primarias. Las niñas se reconocen y reconocen que pueden alcanzar sus sueños. Agradezco esta oportunidad porque me permite regresar a mi comunidad y a la sociedad lo mucho que me han dado. Nuestro esfuerzo, el esfuerzo de mis colegas, compañeras, amigas, rinde frutos de formas diversas, las siguiente generaciones de mujeres lo reconocerán y ayudarán a impulsar a otras compañeras.