Psicóloga Maira Gallegos
La depresión y la sociedad
“No es lo mismo llorar en un Ferrari que en un Volkswagen”
Frase atribuida a la Doña, María Félix
La Organización Mundial de la Salud (OMS) señala que el trastorno de la depresión es una de las principales causas del deterioro de la salud mental. Entender o definir esta condición se relaciona con la personalidad y el carácter afectivo, cognitivo y comportamental. Al abordarla como un problema psicológico y social implica su carácter de malestar afectivo y físico. Una persona que sufre de depresión encuentra la significación de su problema en el contexto social. El sujeto puede experimentar tristeza, desmotivación, aislamiento, desesperanza, fracaso y pensamiento suicida. En lo físico: falta de apetito, pérdida de peso, insomnio o trastornos del sueño, cansancio, etcétera.
Al ser la depresión un estado subjetivo de malestar físico y emocional se tiene interés en revisar algunos aspectos que devienen de las presiones socio estructurales. Las sociedades actuales acusan los efectos de ese deterioro mencionado por la OMS. La exposición de los individuos a las presiones de lo cotidiano y sus implicaciones tienen un sentido de preocupación que va en aumento, sobre todo en las naciones más desarrolladas de todo el orbe. Se aprecia que los efectos y emociones de la modernidad en la inmediatez son el génesis de las distorsiones personales o de grupo en un tiempo que se define como un sistema disfuncional que desemboca en una percepción distorsionada de la realidad.
Según el tipo de modelo atributivo de la depresión, desde el punto de vista conductual y fisiológico, el trastorno no necesita tomar en cuenta los factores externos, según lo dice Ernesto Lammoglia (2005). Se ha comprobado y aceptado que la depresión se manifiesta o desencadena de acuerdo a predisposiciones genéticas y alteraciones bioquímicas en el cerebro. Como consecuencia, comprende síntomas en todos los sistemas y aparatos del organismo. Se llama depresión porque deprime el estado de ánimo del sujeto y las funciones intelectuales y respuestas inmunológicas y psicológicas, alteraciones del aparato digestivo, urinario, sistema nervioso central y gónadas. Predispone también una serie de enfermedades que pudieran interpretarse como el dilema principal cuando un médico no experimentado realiza el diagnóstico donde el problema de origen es la depresión. La depresión se oculta detrás de otros síntomas comunes a otras enfermedades como colitis, gastritis, hemorroides y todas las que tienen que ver con el sistema nervioso central, deficiencias inmunológicas, enfermedades cardiacas y renales. De la misma manera, diferentes tipos de cáncer y otros trastornos combinados a la depresión, como los de la alimentación (obesidad, bulimia, anorexia) y del sueño.
En contraste, en un estudio realizado en el 2010, en España, llamado “Causas sociales de la depresión”, se menciona que factores externos al sujeto influyen en la etiología (origen) de esta condición. En relación a esto, la autoestima y autoimagen como valoraciones de la identidad personal, dependen de la interacción con los otros en una misma sociedad y cultura. Asimismo, la llamada alineación explica que un individuo está despojado de su capacidad de influir sobre su medio, porque actúa en un vacío normativo, simbólico interpersonal. Es decir, el medio influye sobre él.
De manera práctica y fáctica, decirle a una persona que padece depresión (o cualquier otro trastorno del estado de ánimo) “échale ganas”, es el peor error que se puede atribuir a la falta de compresión y dimensión real de esta condición problemática que afecta a la sociedad actual.
El grupo de apoyo tiene importancia ya que es benéfico para el bienestar psicológico y la disminución en el impacto de los factores estresantes que desencadenan la depresión. Ese, en conjunto con la alienación y autoestima, dependen de la posición social y las condiciones materiales que exponen a las personas a situaciones de dominio o de falta de control sobre el medio. Por otro lado, el grupo de apoyo se interpreta (en el área clínica) como los demás sujetos que rodean al individuo que padece de depresión (familiares y cercanos), quienes acompañarán en el proceso y el tratamiento correspondiente y que, de algún modo, facilita y beneficia para disminuir el nivel la depresión.
Por último, hay que destacar que la depresión afecta más a los grupos sociales con bajos niveles socioeconómicos, los cuales tienen mayor vulnerabilidad. (en pobreza y pobreza extrema).
En la actualidad un modelo explicativo del origen de la depresión que limita y no permite tomar en cuenta nuevos factores que influyen en las causas ya no es suficiente, por lo que es y será necesario revisar y reencuadrar la forma en que se ha estudiado no solo la depresión sino también otros trastornos.
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