Skip to main content

Abre los ojos. Abre el cerebro. Atrévete a dar la zancada. ¿Lo quieres? Persíguelo. ¿No lo quieres tanto o no lo quieres? Abandona. Si decides perseguirlo o abandonarlo, atente a las consecuencias. Crece. Conviértete en adulta. Ajusta tus sueños al alta. Si algo parece demasiado grande: construye, escala, crece hasta donde requiera la circunstancia. ¿Cómo ajustar a la baja, cuando hay ya tantos sueños cumplidos, tantos desafíos conquistados, tanto resplandor en las pupilas? Abre los ojos. Abre el cerebro. Da esa zancada. Eres tú. Eres única. Eres poderosa.