LA EXTINCIÓN DE LOS ÓRGANOS AUTÓNOMOS
Por: Arturo Nahle García
Esta semana la aplanadora de Morena y sus aliados volverán a reformar la Constitución para seguir dándole gusto a López Obrador, ahora van a extinguir siete órganos autónomos: el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL), la Comisión Nacional de Mejora Continua de la Educación, la Comisión Reguladora de Energía, la Comisión Nacional de Hidrocarburos, la Comisión Federal de Competencia Económica, el Instituto Federal de Telecomunicaciones y el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI).
Las funciones que tienen éstos órganos pasarán a diversas dependencias del Gobierno Federal, algunas al INEGI y al Instituto Nacional Electoral.
Yo estoy totalmente de acuerdo con la extinción del CONEVAL y sus siete Consejeros, el INEGI puede perfectamente medir la pobreza y que la política de desarrollo social la evalúe la Función Pública y la Auditoría Superior.
También estoy de acuerdo en la extinción de la Comisión Nacional para la Mejora Continua de la Educación, siempre me pareció un exceso que tuviera una Junta Directiva con cinco integrantes, un Consejo Técnico con otros siete integrantes y aparte un Consejo Ciudadano. Burocracia magisterial totalmente innecesaria.
También me parece un acierto la extinción de la Comisión Reguladora de Energía con sus cinco Comisionados y la Comisión Nacional de Hidrocarburos con otros cinco Comisionados; éstas Comisiones nunca fueron órganos constitucionales autónomos sino simples órganos desconcentrados de la Secretaría de Energía, o sea siempre han sido parte del Poder Ejecutivo; su creación a rango constitucional fue muy extraña, lo correcto es que la Secretaría de Energía sea quien lleve a cabo la regulación técnica, económica y sancionadora en materia energética y de hidrocarburos.
Respecto a la Comisión Federal de Competencia Económica y sus siete Comisionados, así como el Instituto Federal de Telecomunicaciones y sus siete Comisionados, me parece que si se extinguen y se le transfiere a la Secretaría de Economía la facultad de garantizar la libre competencia y concurrencia; y a la SCT la facultad de otorgar, revocar y autorizar cambios a los concesionarios de radio y televisión, no pasa nada.
Lo que si me parece arbitrario es que los actos y omisiones de estas dependencias solo podrán ser impugnados mediante juicio de amparo indirecto y no serán objeto de suspensión; ni siquiera habrá recursos ordinarios contra actos intraprocesales. Esto evidentemente no le gustará ni a los radiodifusores ni a las televisoras.
Lo más desafortunado es la extinción del INAI, los mexicanos ya no tendremos un órgano autónomo que obligue a todas las autoridades a promover, respetar y garantizar el derecho de acceso a la información pública y a la protección de datos personales.
La excepción será la información de los partidos políticos y los sindicatos, a los primeros el INE se encargará de obligarlos y a los segundos el Centro Federal de Conciliación y Registro Laboral.
Siempre dijimos que siete Comisionados en el INAI eran demasiados y que su estructura orgánica era excesiva, siempre propusimos redimensionarlo, adelgazarlo, pero no desaparecerlo.
Y en los Estados pasará lo mismo, se eliminarán todos los organismos autónomos estatales que garantizan el derecho de acceso a la información, esa función la tendrán ahora los Órganos Internos de Control de cada dependencia u organismo.
Las legislaturas locales tendrán un plazo de 90 días para armonizar el marco jurídico en materia de acceso a la información.
Finalmente, se modificará el artículo 41 constitucional para que el Comité Técnico de Evaluación para la elección de los Consejeros Electorales esté integrado por cinco personas, en lugar de siete, el absurdo es que tres serán nombradas por la Junta de Coordinación Política de la Cámara de Diputados y dos por la Comisión Nacional de los Derechos Humanos.
Las economías que se generen con la extinción de estos entes públicos se destinarán al Fondo de Pensiones para el Bienestar y los derechos laborales de los trabajadores supuestamente serán respetados. No lo creo, esos órganos en su momento se los repartieron el PRI, el PAN y hasta el PRD, es obvio que ahora Morena va por ellos.
Magistrado