Skip to main content

¿Hay mejor regalo que la solidaridad?

Bennelly J. Hernández Ruedas.

El 14 de febrero es un día en el que tradicionalmente celebramos el amor y la amistad. Las muestras de afecto no se hacen esperar, a través de regalos, mensajes y momentos compartidos. Sin embargo, más allá de los gestos románticos o fraternales entre quienes tenemos cerca, existe una manera aún más significativa de conmemorar esta fecha; a través de la solidaridad y el apoyo a quienes más lo necesitan.
El amor no solo se demuestra en palabras o detalles materiales, sino también en acciones desinteresadas que generan bienestar en los demás.
En este sentido, el ayudar sin esperar nada a cambio, se convierte es una de las expresiones más puras de amor al prójimo. Porque un acto de generosidad, puede hacer una diferencia enorme en la vida de alguien.
La pobreza y la marginación son realidades que no podemos ignorar; en este contexto, la solidaridad cobra un sentido profundo. Regalar esperanza, ofrecer apoyo y contribuir al bienestar de los demás, es una forma de amor que trasciende a cualquier fecha en el calendario.
Es por ello que, desde la Secretaría de Desarrollo Social del Gobierno de Zacatecas, trabajamos con un enfoque humano y sensible, con el propósito de atender a quienes más lo necesitan.
Nuestro compromiso es generar oportunidades y mejorar la calidad de vida de las familias zacatecanas, especialmente aquellas que se encuentran en condiciones de pobreza o pobreza extrema.
Cada programa, cada acción y cada esfuerzo tienen un mismo objetivo, construir una sociedad más justa y equitativa.
Ejemplos de amor en acción los encontramos en múltiples iniciativas; desde la entrega de apoyos sociales a sectores vulnerables, hasta la implementación de programas que fomentan el desarrollo social y económico.
Este 14 de febrero, más allá de los regalos convencionales, podemos elegir celebrar el amor y la amistad desde una perspectiva más amplia. Haciendo una visita a un asilo; una donación a una persona o familia que requiere; un gesto de solidaridad hacia un compañero o conocido que atraviesa por una situación difícil o, simplemente un acto de amabilidad, pueden convertirse en la mejor manera de festejar.
Porque la verdadera esencia de esta fecha no radica en lo que damos materialmente, sino en el impacto que nuestras acciones generan en los demás.
Hagamos de este Día del Amor y la Amistad, una oportunidad para fortalecer lazos, no solo con quienes forman parte de nuestro círculo cercano, sino también con nuestra comunidad.
La empatía y la solidaridad son valores que, cuando se practican con constancia, construyen una sociedad más unida y con mayores posibilidades de desarrollo para todos. En esta fecha, te invito a que socialicemos el llevar a cabo acciones concretas, en favor de los demás, buscando transformar vidas.
Que este 14 de febrero sea un recordatorio de que todos tenemos la capacidad de hacer el bien y de que la felicidad que brindamos a otros es, en sí misma, el mejor regalo que podemos recibir.