LA LUCHA MAGISTERIAL
Por: Arturo Nahle García
Al triunfo de la revolución, el principal reto de los gobiernos post revolucionarios fue alfabetizar a un país en el que el ochenta por ciento de sus quince millones de habitantes no sabían leer ni escribir; y es que durante la colonia solo los españoles y criollos tuvieron acceso a la educación, fundamentalmente en conventos y seminarios; el convulso siglo XIX no permitió abrir escuelas y en el porfiriato los servicios educativos se focalizaron en áreas urbanas en un país mayoritariamente rural.
En la década de los veintes José Vasconcelos inició el esfuerzo alfabetizador, impulsó la escuela rural, implementó la difusión de las bibliotecas, apoyó el desarrollo de las bellas artes, impulsó la educación media, inició la edición de libros de texto gratuitos y el reparto de desayunos escolares a la población infantil.
Los esfuerzos de Vasconcelos fueron continuados por gigantes de la educación como Narciso Bassols y Jaime Torres Bodet, entre otros.
La figura del maestro se mitificó en películas como “Río Escondido” protagonizada en 1948 por María Félix quien personificó a una humilde maestra que con valor se enfrenta al cacique del pueblo, el guion fue escrito por el Indio Fernández y el ilustre zacatecano Mauricio Magdaleno. Y qué decir de “Simitrio”, filmada en 1960 en la que el incomparable José Elías Moreno interpretó a Don Cipriano, un maestro casi ciego que es víctima de las peores travesuras de sus alumnos. Todavía en 1971 el reconocimiento social al magisterio, por no decir veneración, se reflejaba en cintas como “El Profe” de Cantinflas.
Mi abuela materna fue maestra rural y me platicaba que el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación nació en 1943 como un sindicato único y nacional, por eso de inmediato se convirtió en un botín político de la mayor importancia para el gobierno, convirtiéndolo en un pilar fundamental de la poderosa CTM y por lo tanto del PRI. Esa condición propició el encumbramiento de líderes corruptos que administraban a discreción las multimillonarias cuotas sindicales.
Por Secretarios Generales de triste memoria como Carlos Jongitud Barrios y Elba Esther Gordillo surgieron al interior grupos opositores como la Coordinadora, pero el SNTE es tan grande (un millón trescientos mil afiliados), que es absolutamente normal y hasta saludable su pluralidad.
Recuerdo que en 1998 la disidencia zacatecana encabezada por mi entrañable Armando Cruz Palomino y Víctor Fernández “el Grande”, tomó el control del sector, fue parte del proceso de perredización de Ricardo Monreal; desde entonces el estire y afloje entre los “democráticos” y los llamados “charros” estuvo atrás no solo de los procesos internos en las secciones 34 y 58, sino también de casi todas las movilizaciones.
Por cierto el mote de “líder charro” se debe a Jesús Díaz de León, alias “el charro”, líder nacional de los ferrocarrileros originario de Ojocaliente que en 1948 fue destituido por los trabajadores pero el presidente Miguel Alemán lo restituyó en el cargo con el uso de la fuerza pública; al año siguiente se hizo lo mismo en el sindicato petrolero, desde entonces cada que un líder traiciona a sus representados se dice “dio el charrazo”.
El paro magisterial y la mega movilización de esta semana deja claro que la vieja práctica oficial de infiltrar a los sindicatos a través del control de sus líderes está quedando en el pasado, lo mismo que la división interna; yo veo hoy a un sindicato de maestros unido, organizado, fuerte, haciendo lo que debe hacer todo sindicato, luchar por mejores condiciones de trabajo y salariales para sus agremiados, al margen de filiaciones partidarias.
Ojalá que la sensibilidad política y el diálogo se sobrepongan, hay demasiados fierros en la lumbre, por ejemplo la huelga en la UAZ, las protestas por el segundo piso, las crisis de seguridad, el estancamiento económico, el fantasma de las deportaciones masivas y la proximidad de una polémica elección de ministros, jueces y magistrados.
Es un cóctel sumamente complicado que hace muchos años no veíamos en Zacatecas.
Magistrado (hasta Septiembre)