Dr. Pablo Quezada
Derecho humano al agua y contexto constitucional
En 2012, con una reforma constitucional, se reconoció que “toda persona tiene derecho al acceso, disposición y saneamiento de agua para consumo personal y doméstico en forma suficiente, salubre, aceptable y asequible.” Esto hizo necesario adaptar las leyes de agua (y su regulación) para garantizar ese derecho. La LAN es la principal ley que regula cómo se administra ese derecho al agua nacional.
Historia de reformas y críticas
Desde su promulgación en 1992, la Ley ha sido reformada varias veces: al menos en 2004, 2011, 2012, 2014, 2016, 2020 y 2023. La reforma de 2004 fue especialmente relevante: fortaleció el papel de la CONAGUA como autoridad única y redefinió muchos aspectos del régimen de concesiones/asignaciones. Para muchos críticos, la ley — especialmente desde 1992 — abrió la puerta a que el agua se tratara como un recurso económicamente explotable, no solo como un bien público esencial. Esto ha generado tensiones entre el uso comercial, agrícola, industrial y el derecho humano al agua. Asimismo, algunos han señalado que la ley (y las prácticas derivadas) han favorecido la asignación de concesiones extensas (a veces subutilizadas), lo que podría llevar al acaparamiento o mal uso del agua nacional.
Cambios recientes y la propuesta de una nueva ley
En 2025 se ha presentado una iniciativa para reformar la Ley de Aguas Nacionales, es decir, crear lo que sería una Ley General de Aguas. La intención declarada: reconocer el agua como derecho humano y como bien estratégico nacional, reforzando el control estatal sobre los recursos hídricos y su gestión sostenible. Entre las propuestas están: limitar la extinción por pago de garantía, reforzar sanciones — incluso crear capítulos sobre “crímenes relacionados con el agua”; revisar y regular concesiones, y hacer énfasis en la gestión sustentable. También se busca actualizar el esquema de responsabilidades entre Federación, Estados y municipios en cuanto al suministro, saneamiento y acceso al agua, para asegurar el derecho fundamental reconocido constitucionalmente.
Retos, tensiones y controversias actuales
Estos puntos muestran por qué la regulación del agua en México sigue siendo fuente de debate y conflicto:
Derecho humano vs. concesiones privadas/comerciales: Cómo garantizar que todas las personas tengan acceso al agua — para consumo doméstico —, mientras se mantienen derechos de explotación (agrícola, industrial, comercial) sin comprometer la disponibilidad. Concesiones excesivas y acaparamiento: Cuando grandes volúmenes de agua son concedidos a particulares, existe el riesgo de que no se usen de forma eficiente, o que queden subutilizados, lo que afecta la disponibilidad general. Sostenibilidad ambiental y sobre-explotación: La LAN regula cantidad y calidad, pero la sobre-explotación de acuíferos, cambios climáticos, contaminación, sequías y malas prácticas hacen difícil garantizar agua suficiente para todos. Desigualdad regional: México tiene regiones con más estrés hídrico, sequías recurrentes o desigual acceso, lo que exige una gestión eficiente de cuencas, distribución equitativa — y eso depende en gran parte de políticas públicas e inversión en infraestructura. Necesidad de una ley actualizada que reconozca nuevos retos (derecho humano, cambio climático, gestión integral, participación ciudadana, transparencia). Por eso la propuesta de la Ley General de Aguas busca modernizar el marco legal.
Por qué importa la Ley de Aguas Nacionales para ti (y para tu estado)
Como ciudadano de Zacatecas — un estado que enfrenta retos hídricos típicos del centro-norte de México la LAN define: quién puede usar agua del subsuelo o superficial, y en qué condiciones, qué obligaciones tienen los usuarios (industriales, agrícolas, municipales), las responsabilidades del Estado para garantizar acceso, distribución, conservación, y saneamiento, posibilidades de participación ciudadana, aunque con una autoridad central fuerte. Además con la propuesta de reforma actual — podrían cambiar las reglas de concesión, control y distribución, lo que impactaría cómo se gestiona el agua en tu región.
*Dr. en Educación



