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DÍA INTERNACIONAL DE LA ELIMINACIÓN DE LA VIOLENCIA CONTRA LA MUJER

Doctora Sonia Ruíz

Se conmemora el día 25 de noviembre para denunciar la violencia que se ejerce sobre las mujeres en todo el mundo y reclamar políticas en todos los países para lograr su erradicación. La convocatoria la inicia el movimiento feminista latinoamericano en 1981, en conmemoración de la fecha en la que fueron asesinadas en 1960, las tres hermanas Mirabal: Patricia, Minerva y María Teresa, en República Dominicana. Todos debemos entender por violencia contra la mujer a todo acto de violencia basado en la pertenencia al sexo femenino que tenga o pueda tener como resultado un daño o sufrimiento físico, sexual o psicológico para la mujer, así como las amenazas de tales actos, la coacción o la privación arbitraria de la libertad, tanto si se produce en la vida pública como en la vida privada.
La violencia contra las mujeres se ha convertido en un problema estructural, se dirige hacia las mujeres con el objetivo de incrementar su subordinación al género masculino. Sin duda alguna, en lo personal creo que su origen radica en la falta de equidad en las relaciones entre hombres y mujeres en diferentes ámbitos y en la discriminación persistente hacia las mujeres. Se trata de un problema social presente, tanto en el ambiente doméstico como en el público, en diferentes vertientes: física, sexual, psicológica, económica, cultural y otras y afecta a las mujeres desde el nacimiento hasta la edad avanzada. No está confinada a una cultura, a una región o país específico, ni tampoco a grupos específicos de mujeres en la sociedad.
El combate entre la violencia de género tiene una importante dimensión política, entre las claves para luchar contra esta y avanzar en la prevención, está la educación y que exista la justicia que evite la impunidad. Alcanzar la equidad de género, pasa necesariamente por transformar las reglas sociales y los roles que subordinan a la mujer, según la directora de la ONU, Mujer para las Américas y el Caribe (Luiza Carvalho).
La forma más común de violencia experimentada por las mujeres a nivel mundial es la violencia física infligida por una pareja íntima, lo que incluye mujeres golpeadas, obligadas a tener relaciones sexuales o víctimas de alguna otra forma de abuso. Hay otra forma de abuso como el tráfico de mujeres, la mutilación genital femenina, el asesinato por causa de la dote, el “homicidio del honor” y la violencia sexual en los conflictos. Las estadísticas hablan de un 70 % en mujeres que experimentan violencia en el transcurso de su vida, como personal de salud me atrevo a refutar el dato para incrementarlo, siendo en primer lugar, la violencia psicológica, seguida de la sexual. En México, según Endireh (Encuestas Nacionales sobre la dinámica de las Relaciones en los Hogares), la violencia de pareja contra las mujeres es un problema significativo, en el 2011 fue de 47 %, casi una de cada 3 mujeres experimenta violencia en algún momento de su vida, el riesgo es especialmente alto para las adolescentes. Lamentablemente para miles de mujeres el ciclo de violencia de género termina de forma trágica con un homicidio a manos de su pareja o algún miembro de su familia. Es importante que cada vez que se conmemore esta lucha, se tenga de una forma generalizada la conciencia de las repercusiones que quedan en cada mujer violentada, ya que afecta de manera negativa su bienestar en general y les impide participar plenamente en la sociedad. Supone costos altísimos, desde una mayor atención sanitaria y gastos legales hasta pérdidas de productividad. De un total de 165 países con leyes contra la violencia en el hogar, solo 104 tienen una legislación integral en esta materia, sin embargo, es evidente que, en los países con legislación contra la violencia en el hogar, tienen tasas más bajas de violencia en la pareja, por otro lado, las estadísticas hablan que tan solo un 40 % de mujeres después de experimentar violencia, buscan ayuda, por lo que es necesario que sigamos promoviendo y apoyando el acceso a mujeres y niñas a centros esenciales para su denuncia y protección.