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Sonia Ángelica Ruiz
¿BAJAR DE PESO O ADELGAZAR?

El primer paso para resolver un problema, es entenderlo. Si no conocemos ni entendemos los factores que crean un metabolismo lento, las mil y una dietas no funcionarán jamás, será un fracaso más agregado a nuestra lista de derrotas y la diferencia entre el éxito y el fracaso siempre será el conocer los obstáculos y las soluciones y esto se aplica en todo.
Si usted decide que puede, usted puede, si decide que lo va a intentar, usted ya fracasó desde antes. Hay que tener en cuentea que se topará con dificultades, pero también hay que saber que todo logro lleva un proceso que va nutrido por la perseverancia.
Es un dominio mental el que se tiene que bajar de peso, es solo una idea fija, lo importante, es adelgazar, es perder la adiposidad del cuerpo y es algo muy diferente. Imagina un kilo de grasa y un kilo de músculo, los dos pesan lo mismo, pero la grasa es de mayor volumen, entonces, lo que verdaderamente se requiere es adelgazar, bajar de talla aunque no bajes de peso.
Como nutrióloga, siempre estaré en contra de los ayunos prolongados y de que mis pacientes se acueste sin cenar, porque lo único que se está logrando es que el cuerpo se esté adaptando a tener escasez de comida y el organismo para protegerse hace que se disminuya la función de la tiroides y con ello disminuya el metabolismo con un consiguiente acumulo de grasa. Luego cuando la persona cena y come de más, viene el mentado rebote. El cuerpo acostumbrado a una escasez, al momento de llegarle la comida, la acumula para almacenarla por si viniera otra malpasada, pues no hay que olvidar que nuestras células tienen memoria. Los alimentos nos dan energía utilizable para el metabolismo y para lograr extraer esta energía, hay que lograr que los procesos y cambios químicos que el cuerpo necesita, se lleven a cabo, para esto, el cuerpo humano utiliza más de 500 enzimas. Las enzimas dependen de las vitaminas y de los minerales para poder ejercer su acción.
En lo personal, soy del 20 % de los médicos que no les resta importancia a la práctica de suplementar a mis pacientes con vitaminas y minerales, pero, ¡Oh, sorpresa! Más del 60 % de los médicos toman algún suplemento…
Las vitaminas de alta potencia nunca tienen menos de 25 mg, si consigues por ejemplo las del complejo B de 50 mg, aun mejor. Cuando alguien ha tenido una dieta a base de abundantes carbohidratos refinados, acumula muchas deficiencias que afectan la producción de energía, si a esto le sumamos el tomar medicamentos para la diabetes, para la hipertensión, para el corazón y para otras enfermedades, estamos acondicionando una deficiencia de vitaminas. Por ejemplo la aspirina, te ocasiona deficiencia de vitamina C y de vitamina B12, la vitamina B12 es esencial para la hemoglobina, que son las células que transportan el oxígeno a las células del cuerpo. Algunas deficiencias de vitaminas y minerales repercuten en el buen funcionamiento de la glándula tiroides, que es la que controla prácticamente el metabolismo del cuerpo. Por ejemplo, la hormona T4 se convierte en T3 en una total dependencia del selenio y no se puede producir T4 si estamos deficientes de Zinc o de Cobre. De igual manera, la insulina no se llega a fabricar cuando hace falta magnesio. Entonces, ¿sí comprendes la necesidad e importancia de suplementarnos?
Hay estudios donde se comprueba que el 95 % de las personas que empiezan una dieta, la abandonan en menos de un año, volviendo a ganar el peso que hayan perdido o la talla que hayan bajado y es que, en realidad las dietas no funcionan y no funcionan porque es un concepto negativo, es como prohibirse o negarse algo y es que, tal pereciera que la escasez genera necesidad. Comer, es uno de los placeres de la vida y no es más que saber hacerlo, sin olvidar que si lo haces correctamente nunca subirás de talla, sino por el contrario, perderás tallas. Entre más carbohidratos refinados y glucosa comas, más insulina producirás y entre más insulina produzcas más engordarás, pues la insulina es la responsable de engordarnos. A veces da fobia comer grasas por el temor de subir de peso, pero realmente comer unas ricas chuletas fritas de cerdo con una buena ensalada no hay repercusión, el error es combinar esas grasas con carbohidratos refinados como arroz, frijoles, papas y tortilla, pues son alimentos que producen mucha reacción de insulina en el cuerpo, además de que es la hormona que aumenta el apetito. En lugar de dieta, deberíamos nombrarle estilo de vida y estacionarnos en un balance sin extremos, donde esté protegiendo su metabolismo, sin sobre peso, con un nivel alto de energía, donde se sienta cada vez con mejor salud y eliminar la idea errónea de vejez, sinónimo de medicamentos. Apéguese a los estilos de vida saludables…