TLATELOLCO Y AYOTZINAPA
Por: Arturo Nahle García
La 4T está a punto de convertir el caso Ayotzinapa en otro Tlatelolco y pareciera que en Palacio Nacional no han dimensionado las consecuencias del rumbo que le está dando al asunto el Subsecretario de Gobernación Alejandro Encinas secundado por el Fiscal Hertz Manero.
Culpar al Ejército de lo ocurrido en Iguala no solo es un absurdo, es un error político gigantesco que puede acabar con la “luna de miel” que viven el Presidente López Obrador y las fuerzas armadas.
AMLO les dio el soporte legal para sus tareas en materia de seguridad pública, les dio el control de la Guardia Nacional, la construcción del aeropuerto “Felipe Ángeles”, el Tren Maya y hasta las aduanas, entre otras cosas.
¿Por qué ahora la 4T les pega culpándolos de algo que no hicieron? ¿Por qué endilgarles otro Tlatelolco?
El 2 de octubre de 1968 sí fue el Ejército y elementos de Gobernación quienes asesinaron a estudiantes que se manifestaban en la Plaza de las Tres Culturas, en Iguala no, el 26 de septiembre del 2014 cerca de cien normalistas de Ayotzinapa fueron atacados a balazos y detenidos por la policía municipal de esa ciudad, 43 de ellos están desaparecidos.
Los más de 50 normalistas sobrevivientes son testigos de lo ocurrido, también los choferes de los cinco autobuses en que se movilizaron los estudiantes, lo mismo los centenares de personas que estaban en el zócalo festejando el informe de la presidenta del DIF, hay infinidad de videos que dan cuenta de lo sucedido. Las balas que asesinaron a unos e hirieron a otros salieron de las armas de los municipales, eso está plenamente acreditado en múltiples peritajes de balística.
Hay testigos directos de que veinte normalistas fueron llevados a la barandilla y de ahí sustraídos por la policía de Cocula para desaparecerlos. El autobús donde iban los otros 23 desaparecidos, fue interceptado por cinco patrullas en la salida a Chilpancingo.
En los otros ataques ocurridos esa noche tampoco participó el Ejército, ni en el ataque al taxi donde hubo dos heridos, ni en el ataque al autobús donde viajaba un equipo de futbol y murieron un jugador y el chofer, ni en el ataque a otros dos taxis donde murió una señora e hirieron a dos, ni en el último ataque donde unos encapuchados mataron en el zócalo a dos jóvenes.
La PGR detuvo a 142 involucrados, varios confesaron con lujo de detalle por qué y como lo hicieron. Ah! pero “los expertos” de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos a fuerza quieren culpar al Ejército y Encinas mordió el anzuelo. Que grave!
*Magistrado Presidente del Supremo Tribunal de Justicia del Estado de Zacatecas
