100% EN TRANSPARENCIA, UN CORTE DE CAJA.
Nubia Barrios
El IZAI realiza cada año un programa anual de verificación mismo que es publicado en el periódico oficial órgano de gobierno del estado.
Dicho programa tiene la finalidad de presentar el cómo y el cuándo de las obligaciones de transparencia que son comunes para todos los sujetos obligados, es decir, para presidentes municipales, servidores públicos, sindicatos, partidos políticos, universidades públicas, organismos autónomos y demás poderes públicos.
¿Cuál es su finalidad? Primero es que la información pública se encuentre a la vista de forma correcta en Plataforma Nacional de Transparencia y ¿qué significa eso de que se cargue la información correctamente? Significa que de acuerdo a los formatos que emite la propia plataforma en coordinación con los Lineamientos Técnicos Generales emitidos por el INAI y el propio Sistema Nacional de Transparencia, es que se debe dar cumplimiento, cabe señalar, que no es una tarea fácil, el llenado de formatos trimestre a trimestre, es una actividad compleja y un tanto complicada por parte de quien lo hace, que en la mayoría de los casos las unidades de transparencia son quienes se encargan de realizar el trabajo.
Por otro lado, el IZAI a través de su equipo de profesionales y quienes la mayoría de ellos tienen vasta experiencia en verificación, son quienes determinan quién cumple y está en condiciones de ser merecedores a un reconocimiento del 100% de cumplimiento. Para que un sujeto obligado lo reciba, significa que hay mucho trabajo operativo y de escritorio detrás, significa que estuvo en contacto permanente con su verificador, así como con el personal o área de su dependencia de forma constante hasta lograr el 100.
El IZAI ÚNICAMENTE RECONOCE A QUIENES OBTIENEN EL 100 LIMPIO, es decir, no con un 98% de cumplimiento, sino el 100 y lograrlo, créame, no es tarea fácil, reconocer a los sujetos obligados cumplidos no es a capricho y nunca lo ha sido, la primera verificación que se realizó de manera formal fue a través de LEMA (Laboratorio de estadística y matemática aplicada) quienes con las herramientas mínimas, analizaban la información pública que obligaba la Ley de Transparencia de aquél entonces y en base a ello fue que el primer Pleno de la entonces CEAIP determinó reconocer a quienes cumplían como una forma de incentivar a los demás a hacer lo mismo y ha funcionado, toda vez que no hay sujeto obligado que no busque su 100, unos lo alcanzan a la primer vuelta, otros a la segunda y tercera y otros no les interesa y se quedan con un 70, un 60 o una menor calificación, eso ya depende el interés de cada sujeto obligado y su titular.
Con esta práctica, el IZAI coadyuba de muchas maneras a la erradicación de la corrupción, sin embargo, sólo somos un brazo del sistema, pero no somos el Sistema Estatal Anticorrupción, somos el Sistema Nacional de Transparencia y tenemos diversos procedimientos cada uno con su propio marco regulatorio y procedimental como lo es, contestación a una solicitud de información, procedimiento de un recurso de revisión, desahogo de una denuncia por incumplimiento, medida de apremio, apercibimiento público y privado, verificaciones de obligaciones de transparencia más aquellos procedimientos opuestos como lo son la protección de datos personales.
La revisión a cada procedimiento es tan meticulosa como lo permite la propia Ley y los Lineamientos, sin embargo, nuestros alcances son limitados, pues el IZAI no es órgano auditor, no se pronuncia sobre la veracidad de la información de acuerdo al artículo 183 fracción V de la ley de la materia.
El IZAI revisa un aproximado de 9 mil 700 obligaciones de transparencia con un limitado número de verificadores, por tanto, es necesario que los presupuestos contemplen una actividad tan noble como lo es el reconocer a aquél que cumple y que obtiene un 100% de cumplimiento no para el Titular (o sí) si no para la Institución, porque el que cada dependencia reciba una sola vez o de forma continua ese reconocimiento no es más que la cereza del pastel al trabajo que hay detrás, reconocimientos que se vienen realizando mucho antes de la existencia de Plataforma Nacional de Transparencia y del propio INFOMEX.
Los reconocimientos que otorga el IZAI no se regalan sino se ganan, con trabajo, esfuerzo y perseverancia con la única finalidad de que todos ellos y en su conjunto cumplan para que a Zacatecas le vaya bien, son motivos de esperanza y legitimidad al trabajo que se genera tras bambalinas y detrás de un escritorio. ¡A ellos son a quienes reconocemos!
La Transparencia es un trabajo de largo aliento y por ello seguiremos trabajando con ahínco para defender los logros que hemos obtenido y que han sido legitimados, esperando que los siguientes trimestres sean aún más quienes logren su reconocimiento al 100% en sus obligaciones de transparencia y el IZAI siga siendo ese órgano facilitador de la información pública al alcance de los ciudadanos.
