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Silvia Montes Montañez

¡Felicidades!

EL NOMBRE Agustín Pablo Quezada Gómez quizá no le diga mucho porque lo conocemos como “El Yo”, seudónimo que sentimos nuestro debido a que expresa la denuncia ciudadana, gracias a su genio y su inteligencia en cartones creativos y fuertes ante los excesos de la vida pública estatal y nacional.

PABLO QUEZADA es ingeniero civil y topógrafo, constructor, maestro de francés, catedrático en ingeniería de la UAZ y saxofonista; su trabajo en cada ámbito es sobresaliente, pero sin duda el impacto social de sus caricaturas es de hondo calado aquí y más allá de nuestra tierra.

EL “TAL YO” nació en Fresnillo y la máxima “nadie es profeta en su tierra” se rompió al momento en que, Saúl Monreal Ávila, alcalde con licencia, promovió la iniciativa de abrir la sala que lleva su nombre en el Ágora del Mineral, otorgándole un reconocimiento sobradamente merecido.

REPRESENTA el hecho un precedente que debe leerse más allá del homenaje en vida, porque no es frecuente reconocer al autor de la crítica aguda y lo que suele prevalecer es el rechazo, el ataque y hasta la denuncia de políticos torpes y de piel muy delgada.

UNA INSTITUCIÓN de la estatura de Pablo es tan poco común que ha sido imposible acercarse siquiera a la dimensión de su aporte periodístico consolidado con su paso por distintos espacios de la prensa escrita donde su presencia fue y es un reto para propietarios y directivos de medios.

COMO PERIODISTA ha hecho y sigue haciendo historia. Su talento es inagotable. Coincidimos en una de las mejores épocas del “Sol de Zacatecas”, entre carcajadas redactábamos calaveras en el “Día de Muertos” y como mi confidente conoció mucho de mí siendo siempre un caballero.

MAESTRO en distintas ramas que incluyen la academia y se entrelazan con el arte y con la crítica, Pablo tiene una personalidad que genera desconcierto, un magnífico sentido del humor y la suya es una vida plena de anécdotas y etapas en las que sus adversarios terminan admirándolo.

INGENIERO por vocación Pablo Quezada ha tenido la capacidad de conjugar su carrera con otras actividades demostrando que su horizonte jamás se ha limitado a una sola actividad porque su perfil es tan basto que esta posibilidad en él resulta absolutamente imposible.

MÚSICO extraordinario y creativo fue pieza fundamental para el surgimiento del grupo de jazz “Arista 5”, donde el toque de su saxofón es un sello como el de otros instrumentos que le han permitido expresar su vena artística ya plasmada en varias grabaciones.

ORGULLO para nosotros, ha publicado muchísimos libros y presentado innumerables exposiciones, las más entrañables en el teatro Fernando Calderón y en salones prestigiados de la ciudad de México y la Habana, Cuba, entre muchos otros, poniendo siempre en alto el nombre de su tierra natal.

ZACATECANO fiel a sus orígenes por supuesto que Pablo Quezada merece la distinción y bien reseñó nuestro colega Francisco Esparza Acevedo su enorme contribución a la lucha infinita por la libertad de expresión, un ejercicio que ha marcado y sigue marcando la vida del tal “Yo”.

Y MÁS ALLA de la entidad Pablo ha cosechado galardones tanto por su trayectoria musical como por su desempeño en los medios de comunicación. La Casa Fender lo reconoció en la música y obtuvo premio nacional para él y su ya entrañable periódico “El Nopal” ¡Felicidades por todo! .

Periodista