NI JUSTICIA, NI VENGANZA, NI REVANCHA
Nota Espe_culera
By Syres
Hace ya cuatro años que la Senadora Soledad Luevano interpuso en la Fiscalía General de la República una denuncia por enriquecimiento ilícito por 307 millones de pesos por supuestas empresas fantasmas relacionadas con la obra pública zacatecana. Tras esta denuncia, otras mas se presentaron en la ahora Fiscalía Local a cargo de Francisco Murillo Ruiseco.
Desde entonces, era sabido que Peña Nieto y Alejandro Tello habían ordenado en el ámbito de sus competencias que las investigaciones locales se mandaran a la congeladora para evitar cualquier problema con su amigo de la infancia.
Pese a que la Senadora necesitaba que el asunto tuviera seguimiento, en realidad las pruebas que presento en contra del ex gobernador, parece que fueron insuficientes, por lo que los siguientes ataques fueron de naturaleza mediática.
A días de que Alejandro Tello termine su administración, pareciera que el pacto de Miguel Alonso ha alcanzado a la administración entrante, quien lejos de solicitar que los trabajos de investigación sean exhaustivos, está buscando recibir la estafeta sin problemas heredados, aunque esto implique la absolución legal del ex gobernador del Estado.
Como dijo Andrés Manuel López Obrador, su administración no dará balazos sino abrazos, y para como vamos, la millonaria estafa que sufrimos los zacatecanos al parecer no solo no tendrá justicia, tampoco venganza ni revancha.
La última instrucción del aun mandatario es el archivo definitivo de las denuncias contra su antecesor, bajo el argumento de pocos elementos probatorios. Si esto llegara a pasar en plena transición es señal de que las relaciones de Miguel Alonso con la mafia del poder ha llegado a la federación, pues con la decisión de Alejandro Tello también se estaría lavando las manos David Monreal, al afirmar, que al llegar su administración, las decisiones del ámbito de la procuración e impartición de justicia ya se habían tomado.
