¿Se ha convertido el tema de la Inclusión en algo que se nos está imponiendo?
Adriana Bujdud Nassar
Consejera de Imagen Profesional
Tocar el tema de la inclusión conlleva una responsabilidad social y moral dentro de la sociedad moderna. De unos años a la fecha, hemos estado viviendo cambios sociales sumamente importantes y revolucionarios que se supone, nos hacen más empático y avanzados en cuanto al desarrollo humano y progreso.
Y digo que se “supone” ya que la intolerancia, las críticas y las imposiciones se han hecho presentes de manera habitual y recurrente. El término “Progres” se vino de moda por esta corriente de supuesto “pensamiento correcto” en donde se lleva la ideología de erradicar la desigualdad social y la inclusión de minorías, defendiendo las creencias de libertad en todos los aspectos y del derecho como ciudadanos. Se definen con ideas nuevas, innovadoras y frescas, dejando atrás lo que llamarían una mentalidad rancia o arcaica.
Continuemos entonces con el tema de la inclusión, si bien es cierto, que se ha visto más avance en el tema de no excluir raza, credos, preferencias sexuales, etc. En el ámbito de la comunicación, marketing, laboral y de manera general en lo social se han presenciado cambios importantes dentro del tejido social, y bien que mal, ahí están. Ahora yo pregunto ¿realmente se nos está imponiendo el tema de la inclusión? La inclusión a personas transgnero en el deporte por ejemplo, integrarlas en categorías que de nacimiento, no les corresponde, definitivamente ahí no hay igualdad hablando de genética; ¿porque no hacer categorías especiales en donde sea parejo el asunto? Y así, todos tienen la oportunidad de despuntar y sin provocar conflictos. Otro tema es de “homosexualizar” todo. La comunidad LGBT se ha ganado su lugar a base de lucha y desde hace muchos años y por lo mismo se les reconoce tal labor incansable; todos somos seres humanos y tenemos el derecho de vivir plenamente y en una sociedad justa, esto es dignidad humana. Entonces, no es necesario que por querer estar bien o quedar bien con la comunidad homosexual las empresas y organizaciones hagan “negocio” por así decirlo, con su noble causa. Una cosa es la empatía y apoyo y otra cosa es aprovechar la causa.
Y la industria del entretenimiento no se ha hecho esperar con este tema de la inclusión, cambiado los esquemas de personajes ya concebidos por décadas dentro de películas o cuentos, tal vez haya cosas (cuentos, películas e historias) que deban dejarse tal cual están, ya sea por tradición o sentimentalismos y esto no significa que seamos intolerantes o conservadores, para eso y más da la imaginación humana, crear más historias con nuevos contextos y situaciones y se verá que tanta aceptación se tiene dentro de la sociedad.
No estuviéramos envueltos en estos temas tan controversiales si desde que nos formamos como sociedad hubiéramos sido más inteligentes al entender que todos somos diferentes y que lo que realmente importa es el valor como personas y qué cosas buenas aportamos a la sociedad, siempre y cuando el respeto se de en ambas direcciones, no solo de manera unilateral. La intolerancia se ha dado por todas partes, tanto de las personas que buscas la inclusión como de los que no aceptan ciertos hechos. Espero en algún momento de nuestra historia como humanidad, nos lleve a vivir sin complejos, prejuicios, sin enojo y con aceptación, todo dentro de lo saludable y positivo para nuestras sociedades.
