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Si no respeto las leyes y las normas ¿Qué pasa?
Luis Noé Maldonado Sánchez

Cuando se explica a los niños lo que es el Estado de Derecho, se les dice que son leyes y normas que debemos de cumplir para vivir en armonía. Se instruye a la niñez que la ley más importante que tenemos es la Constitución Federal así como también una Constitución Local para cada Entidad Federativa. También se les intenta explicar que en el hogar son nuestros padres los encargados de hacer respetar las reglas de la casa, algunas muy sencillas como, hacer la tarea, tirar la basura en su lugar, pedir las cosas utilizando las palabras correctas para ello, por favor, gracias, con permiso, disculpe usted. Sin lo anterior, se explica a los niños, no tendríamos orden ni límites y mucho menos respeto para nuestros familiares, amigos, maestros y para cualquier autoridad. Después de explicarles lo anterior, se hace presente la pregunta siguiente: si no respeto las leyes y las normas ¿Qué pasa?; respuesta obligada: ¡te pueden sancionar! Por ello, para entender lo que es el Estado de Derecho también es necesario entender el valor de la justicia, la cual al igual que las leyes debe aplicarse sin hacer distinción entre hombres, mujeres, ricos o pobres, si somos nacidos en un lugar u otro. Entonces, en la sociedad quien ha hecho algo malo, quien rompe las reglas o daña o perjudica a otro, recibirá el castigo que le corresponde según las leyes, y deberá restituir lo que ha dañado o quitado a otro. El poder Judicial en cada Estado de la República es el encargado de hacer justicia en la sociedad, dando al final a cada quien lo que le corresponde. Bien, pues resulta que en enero de 2018 se publicó el Índice de Estado de Derecho 2017-2018 emitido por la organización independiente y multidisciplinaria denominada The Worl Justice Project, que trabaja para avanzar en el Estado de Derecho en todo el mundo; este índice señala que México se encuentra en el lugar número 92 de 113 países evaluados por esta organización, cayendo con ello 4 posiciones respecto del índice anterior emitido en el año 2016. Este índice mide el desempeño de los 113 países utilizando los siguientes 8 factores: 1) Límites al Poder Gubernamental 2) Ausencia de corrupción 3) Gobierno abierto 4) Derechos fundamentales 5) Orden y seguridad 6) Cumplimiento regulatorio 7) Justicia civil y 8) Justicia Penal. Bueno les platico, los 3 países mejor posicionados en este índice son Dinamarca, Noruega y Finlandia; los 3 últimos son Afganistán, Camboya y Venezuela. Los primer y últimos 3 lugares los ocupan los mismos países desde 2016. México esta púes a solo 21 lugares de Venezuela, obteniendo una calificación de 0.45 en una escala de 0 al 1 (considerando el 1 como el mayor apego al Estado de Derecho) y de los 8 factores evaluados el único en el que México obtuvo un nivel alto de desempeño fue en Gobierno Abierto, y el factor en el que resulto peor evaluado fue Justicia Penal; su calificación en los 8 factores son: 0.61 en Gobierno Abierto, 0.59 en Orden y Seguridad, 0.52 en Derechos Fundamentales, 0.46 en Límites al Poder Gubernamental, 0.44 en Cumplimiento Regulatorio, 0.40 en Justicia Civil, 0.31 en Ausencia de Corrupción, y 0.30 en Justicia Penal. Reflexionemos pues, vivimos en un país en donde no hemos entendido el valor del Estado de Derecho y de la Justicia! no respetamos las leyes y las normas para vivir en armonía, no hemos sabido inculcar a nuestros hijos el respeto a sus padres y a los demás, tampoco establecemos límites a lo que hacen, y lo más grave es que cuando infringen una regla no sabemos castigarlos, pues para muchos de nosotros las nalgadas eran la sanción más efectiva. Lo más lamentable de este pobre, pero muy pobre desempeño de México en el apego al Estado de Derecho a nivel mundial, no es solo el indicador per se, si no que a consecuencia de ello mueren personas. Ya sea porque la autoridad responsable de impartir justicia civil, penal o administrativa no actúa sin distingo entre los ciudadanos y además deja de imponer sanciones a los culpables, sin demora y de manera efectiva o bien porque la corrupción en los distintos poderes termina en una pelea y finalmente en un ajuste de cuentas, faltas al debido proceso, invasión a la privacidad, entre otros, la peor de las consecuencias de un pobre desempeño en el apego al Estado de Derecho es que terminan pagando con su vida los más desprotegidos.
Maestro en Finanzas.