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Revés a la reforma judicial.

Por: Juan Carlos Girón Enriquez*

La Suprema Corte de Justicia de la Nación se ha visto envuelta en una serie de críticas a partir de la reforma del 7 de junio de 2021, por muchas razones, pero una de las más sonadas es la contenida en el artículo décimo tercero transitorio de dicha reforma, puesto que se alargaba el periodo del encargo del presidente de la Suprema Corte y de los integrantes del Consejo de la Judicatura Federal.
Esa situación, además de un sinnúmero de críticas al Ministro Presidente, por la postura sumisa mostrada inmediatamente después de la aprobación de la reforma, también provocó una seria crítica hacia el poder ejecutivo y al poder legislativo.
La ampliación del mandato fue, en su momento, una decisión tomada con intereses políticos por parte del Congreso de la Unión, es equiparable a una violación a la autonomía del poder judicial, pero también constituye, a decir de los Ministros de la Suprema Corte, una violación tajante a los principios constitucionales de autonomía e independencia del poder judicial.
No sabemos a ciencia cierta si se trataba de un interés particular del Ejecutivo en contubernio con el legislativo o fue iniciativa directa por parte del Congreso de la Unión, lo que si sabemos es que no solo se constituye una violación a los artículos 97 y 100 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, si no que, como algunos Ministros lo mencionaron en la sesión correspondiente, se trataba de una reelección de facto así como una violación a los principios democráticos de la constitución.
Ante estas declaraciones, pudiéramos llegar a ser mal pensados y contemplar la posibilidad de que si este artículo pasaba desapercibido y el Congreso lograba que se ampliara autoritariamente el mandato del Ministro Presidente, entonces de igual forma pudieran agregar algún otro artículo oculto en alguna otra reforma y ampliar el mandato del Congreso, ya sean diputados o senadores o porque no, el Presidente de la República.
He de reconocer que fue una decisión acertada por parte del Pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación el declarar inconstitucional el artículo décimo tercero transitorio de la Reforma Judicial, lo que es lamentable es que el Congreso de la Unión se haya sentido con la atribución de modificar de manera intransigente la designación y duración de los funcionarios de otro poder, violentando a todas luces su autonomía, pero lo que es aún peor es que el propio ministro presidente haya tenido que pasar por tantas y tan contradictorias declaraciones para llegar a este día, puesto que tanta indecisión provoco que perdiera seriedad y credibilidad ante la ciudadanía que mucho trabajo le ha costado al Poder Judicial irla construyendo.
Lo que si no se puede dejar de mencionar en estas líneas es que la exposición de motivos de la Reforma al Poder Judicial va encaminada a erradicar la corrupción y el tráfico de influencias en dicho poder, lo que resulta irrisorio proviniendo tanto del poder legislativo como del poder ejecutivo, como si en esos dos poderes la corrupción y el tráfico de influencias no existieran.
Querer que desaparezcan ese tipo de prácticas en cualquiera de los Poderes de la Unión, a partir de una violación flagrante a la Constitución, no parece la mejor forma de erradicar esas conductas. Pero intentar erradicar esas conductas a partir de la intromisión al Poder Judicial no es el mejor camino, puesto que si lo analizamos objetivamente, existe mayor corrupción y tráfico de influencias en el Poder Ejecutivo y el en Poder Legislativo, pero ahí no vemos reformas contundentes que acaben con la corrupción.
El Poder Judicial podrá no ser ejemplo de pulcritud, pero que sean el ejecutivo y el legislativo quienes señalen sus yerros, en lugar de ser una crítica constructiva, parece un acto de envidia en el que solo los otros poderes – ejecutivo y legislativo - pueden ser corruptos y nadie más.
El que esté libre de pecado que tire la primera piedra.

*Docente Investigador de la Unidad Académica de Derecho de la Universidad Autónoma de Zacatecas. e-mail: giron705@hotmail.com