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POR EL RESPETO A NUESTRA MARCHA ZACATECAS

La Marcha Zacatecas es la composición musical, de su tipo, más representativa de nuestro estado. Considerada nuestro segundo himno nacional, recientemente se ha integrado en el protocolo de los actos cívicos que se realizan en las instituciones públicas de nuestro país. Creo que nadie me dejará mentir cuando digo que, al escuchar sus primera notas musicales, se enciende un sentimiento de pertenencia, identidad y orgullo de nuestra tierra.
Sin duda lo anterior se percibe, aún más, cuando la interpretación se hace en vivo, me refiero al momento en que alguna de las bandas sinfónicas de nuestro estado, en cualquier plaza pública o evento, a través de todos sus instrumentos de cuerdas, de viento, metales y percusiones, comienzan a emitir dicha melodía, momentos que hace a muchos de nosotros que se nos “enchine” la piel.
Aún así, existen distintas versiones e interpretaciones de la que, en algún momento, fue llamada “Marcha Aréchiga”, por estar dedicada, en el tiempo de su composición, al entonces Gobernador del Estado de Zacatecas, General Jesús Aréchiga. La hemos escuchado en las típicas callejoneadas, en fiestas, en actos cívicos, pero siempre, insisto, siempre, con un espíritu de respeto hacia lo que representa.
Y es que Genaro Codina, de oficio cohetero y arpista de afición, cuando aceptó el desafío de competir con más compositores para ver quién realizaba la mejor canción, en las tertulias de aquel lejano 1893, quiso justamente eso, que aquella melodía hiciera sentir un escalofrío a los oyentes. Sobra decir que la inspiración vino a Codina en uno de los recorridos que hizo por la Alameda de nuestra ciudad capital.
Así pues, la Marcha Zacatecas representa mucho más que una melodía marcial, es parte de la historia viva de nuestra patria chica. Y ha trascendido y estado vigente, generación tras generación. Se puede decir, pues, que la Marcha es parte de la identidad del zacatecano, es un emblema, un símbolo, es orgullo puro, y forma parte, también, de la zacatecaneidad que nos une como vecinos, como amigos, como paisanos.

Todo lo anterior, estimado lector, lo comento para llegar a un punto, y quiero hacer referencia a la interpretación que se hiciera, hace unos días, en un programa televisivo que conduce la Gobernadora del Estado de Campeche, Layda Sansores, conocido como “Martes del Jaguar”. Quizá muchos no lo sepan pero en dicha emisión se alteró, de manera burda y grotesca, por decir algo, la letra original de la Marcha Zacatecas.
Y es que más allá de los intereses políticos de la mandataria campechana, es bueno tener en cuenta que, en nuestra sociedad, al igual que ocurre en nuestro país, nuestro estado y nuestros municipios, los símbolos importan. Nuestra bandera importa, nuestro himno nacional, también. Por eso el agravio, por eso el enojo de muchos zacatecanos. Porque no se trata de una mofa ni un chascarrillo, sino de una burla a nuestro estado, una burla a los zacatecanos.
Por ello, es que hemos decidido tomar acciones legales e interponer una denuncia, en contra de quien resulte responsable por el ultraje a esta insignia pública, porque tenemos que defender a nuestra tierra, a nuestra gente y por supuesto a los símbolos que nos dan identidad.

Mtro. Saúl Monreal Ávila
Docente de la Unidad Académica de Derecho de la UAZ